El convicto ex senador Héctor Martínez le juró hoy al juez federal Francisco Besosa que él no fue el que le pasó al presidente senatorial Thomas Rivera Schatz el informe del FBI que el político y el periódico El Vocero están usando para denunciar a los que dieron donativos al convicto ex senador Jorge de Castro Font.

La moción en la que Martínez, el convicto empresario Juan Bravo y los abogados de ambos le juran al juez no ser la fuente de la filtración vino en respuesta a la moción que la fiscalía federal sometió ayer en la que identifican claramente el documento como uno que estaba incluido en el paquete de evidencia que se le entregó a la defensa de Martínez y Bravo en anticipo a su juicio.

La fiscalía está pidiendo la investigación de la filtración porque los documentos estaban cobijados por una orden protectora emitida por el propio juez que restringía la divulgación de la evidencia.

El documento que usan Rivera Schatz y El Vocero, pero que ninguno de los dos ha publicado íntegramente, es el informe que el agente del FBI, Rubén Marchand Morales después de entrevistar a De Castro Font en 2009 en Saint Thomas.

Las declaraciones juradas de acusados y abogados tienen el mismo lenguaje. Resalta que todos niegan haber entregado el documento, o cualquier otra evidencia del caso, ‘al senador Rivera Schatz’. La denegatoria no incluye agentes de Rivera Schatz u otras personas, sólo a Rivera Schatz.

Recientemente, Martínez pidió al juez Besosa que se saliera del caso por supuesto prejuicio en contra suya basándose en documentos históricos que salieron de los archivos del Senado.

Además de Martínez, juraron el ‘yo no fui’, el propio Bravo, y los abogados Sonia Torres, Paul Álvarez, Christopher Man, Abbe Lowell, José Pagán Nieves, Joseph Laws, Saraliene Smith, y David Chesnoff.