Recientemente presenciamos uno de esos eventos sub realistas que ocurren en Puerto Rico. El Juez Federal Jose A, Fuste, cual jinete con su fusta en mano, arremetió contra nuestra sociedad aduciendo que ‘Puerto Rico se ha convertido en un país violento tercermundista, peor que Mexico y Guatemala. Es un país tercermundista con código postal’. Sus expresiones enmarcan solapadamente un ataque al gobierno de turno. Creo que debemos poner sus expresiones en justa perspectiva.

Actualmente, las estadísticas presentan las cifras más bajas de criminalidad en más de tres décadas en la isla. De hecho, se han cometido por debajo de 80 asesinatos menos que el año pasado a esta fecha y sobre 700 menos que los ocurridos en el año 2011, cuando bajo la administración Fortuño se rompió el record de asesinatos. Las cifras de delitos Tipo I reflejan el mismo patrón: un descenso dramático y continuo. Mis sinceras felicitaciones a la Policía de Puerto Rico por un gran trabajo. Que pena que al Juez Fusté se le olvidó mencionar esos datos! No obstante, lo más que lamento es que el Juez no haya tenido esa explosión de indignación en los años 2010 o 2011 cuando se registraron los dos años de mayor criminalidad en la historia de la isla y el gobernador Fortuño parecía no tener ni idea de cómo atender el asunto. En ese entonces dónde estaba la fusta de Fusté?

La molestia del Juez Federal contra nuestra sociedad se da en el contexto de una sentencia contra un ciudadano por poseer un arma ilegalmente. Evidentemente, al Juez le molesta (y con razón) la presencia de armas ilegales en el país. No obstante, antes de molestarse con nuestra sociedad o nuestro gobierno, tal vez el Juez debería preguntarse quién tiene la responsabilidad de evitar que esas armas entren a Puerto Rico? Aquí no se producen armas de fuego; las mismas entran ilegalmente a través de nuestros puertos marítimos y aéreos y por el correo federal. Nuevamente, el Juez olvidó que el gobierno federal tiene control pleno de los puntos de entrada de bienes al país. O sea, aunque la culpa sea del jinete, es más fácil fustigar al caballo. Así, debieron fustigar al incompetente e indiferente gobierno federal que usurpa los poderes sobre nuestros puertos y no controla la entrada de armas ilegales. Ya usted puede ver claramente: así es el colonialismo.

*El autor es representante en la Cámara de Representantes por el Partido Popular Democrático.