Este año, el Festival Internacional de Cine de San Sebastián / Donostia Zinemaldia ha reconocido a Benicio del Toro con el Premio Donostia. El actor boricua, emocionado, de pie ante el inmenso auditorio, con gran sencillez, ha dedicado el premio a Borinquen, su Puerto Rico.
Benicio ha centrado su mensaje de agradecimiento en ‘el esfuerzo’, posiblemente debido a su plena conciencia de que el camino a premios como este, un Goya, un premio de Cannes o Berlín, se labran con infinidad de esfuerzos, muchos de estos invisibles y no exitosos. ‘Lo importante es tratar’, ha dicho antes. Su mensaje nos hace evocar una frase de Silvio Rodríguez: ‘Debes amar el tiempo de los intentos, debes amar la hora que nunca brilla…’
‘El primer actor que ganó un Oscar con una interpretación en lengua castellana’, según apunta el periodista Iñaki Gabilondo, suele expresar que hay que continuar intentando conseguir aquello por lo que se lucha. Benicio suele narrar cuántas veces ha tenido que escribir, reescribir, audicionar, afrontando desilusiones, hasta lograr el triunfo. De ese esfuerzo y tesón es que habla.
Al agradecer el galardón otorgado en la comunidad vasca, ha reconocido el esfuerzo de sus colaboradores en el proyecto y sus antecesores, compartiendo así su triunfo con todos ellos.
‘Ese esfuerzo que hace toda una carrera no ha sido solitario. No lo he hecho yo solo. Ha habido mucha gente que me ha ayudado… mi familia, maestros, maestras, cuando jugaba basket, los dirigentes, directores, representantes, escritores, actores, productores, editores… Yo quiero compartir este premio con todos aquellos que me han ayudado… Y si me permiten, yo quisiera dedicarle este premio al pedacito de tierra de donde yo vengo, donde yo nací… donde yo aprendí a amar, yo aprendí a llorar, yo aprendí a reír, yo aprendí a atreverme… y aprendí a respetarme a mí mismo, como a respetar a los demás… donde aprendí a recordar a aquéllos que lo han hecho antes o que lo han intentado antes…’
Sus palabras finales, conmovieron: ‘Se lo dedico a Borinquen / Puerto Rico.’
Lleva a Borinquen en su ser, con naturalidad, así como lleva su propia piel. Los que le vieron llegar a Donostia / San Sebastián, mientras accedía a fotografiarse con sus admiradores y firmaba autógrafos, tal vez no repararon en su gorra de pelotero. En esta no figuraba el nombre de un equipo de pelota famoso o el de una empresa internacional. El bordado de letras doradas, leía, prominentemente, ‘Gramas de Borinquen’…
*La autora es compañera de vida y viuda del líder independentista asesinado por el FBI, Filiberto Ojeda Ríos. Tomado de 80 Grados.
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