El ala-pívot español de Los Ángeles Lakers, Pau Gasol, mostró ‘tristeza’ y ‘frustración’ por la nueva lesión que ha sufrido su compañero de equipo, el escolta Kobe Bryant, que será baja por seis semanas.

Tras conocerse la baja de Bryant, que sufre la fractura de la platea tibial externa de la rodilla izquierda, Gasol dijo que era un duro golpe para el jugador y todo el equipo.

‘Es muy duro cuando te sucede una cosa como ésta’, declaró Gasol al concluir el entrenamiento que los Lakers realizaron hoy en Los Ángeles. ‘Había trabajado muy duro para volver a incorporarse al ritmo de juego del equipo tras la rotura del tendón de Aquiles, y ahora esta fractura es terrible’.

Gasol, que junto a Bryant comenzaban a darle nueva vida al equipo, reconoció que como compañero y amigo que es de Bryant era algo muy duro de asimilar.

‘No sólo es duro de asimilar sino también de entender lo que ha sucedido con su vuelta, pero no hay nada que se pueda hacer, y tenemos que seguir adelante’, destacó Gasol, que junto a Bryant el pasado martes fueron los mejores del equipo ante los Grizzlies de Memphis al aportar 21 puntos cada uno y conseguir la victoria a domicilio (92-96).

Gasol, que había estado de nuevo en los rumores de un posible traspaso en la última semana, ahora se mantiene como la única figura que se mantiene saludable y sobre la que recaerá la mayor responsabilidad de hacer que el equipo mejore en su rendimiento.

‘No es el momento de hablar de nada más que de darle todo el apoyo al compañero lesionado, aunque sabemos de lo fuerte que es tanto física como mentalmente’, comentó Gasol. ‘No tengo ninguna duda que volverá a superar esta nueva adversidad y volverá más fuerte que nunca para jugar’, agregó.

Bryant, de 35 años, que había vuelto a la competición el pasado 8 de diciembre tras haber estado de baja desde abril, cuando sufrió la rotura del tendón de Aquiles del pie izquierdo y tuvo que pasar por el quirófano, sólo pudo jugar seis partidos.

La lesión se la produjo el martes durante el partido que los Lakers disputaron contra los Grizzlies al sufrir un choque fortuito contra el escolta Tony Allen, y aunque siguió jugando, de acuerdo a la resonancia magnética que le hicieron hoy los médicos del equipo, lo hizo con la fractura.

Sin embargo, al concluir el partido en el que disputó 33 minutos, el mayor tiempo desde que volvió a la competición, Bryant declaró que la lesión se trataba de un simple estiramiento excesivo que había hecho.

‘Siempre trato de hacer el máximo de extensión con mis rodillas ahora y siempre’, destacó Bryant, que intentaba ser el primer jugador en recuperar la forma de estrella de la NBA después de sufrir una rotura del tendón de Aquiles, desde que lo consiguió el exala-pívot Dominique Wilkins en la temporada de 1992-93.

Por su parte, el entrenador de los Lakers, Mike D’Antoni, declaró que no pensaba que la nueva lesión de Bryant tenga que ver algo con la vuelta demasiado pronto a la competición.

‘Hay siempre un riesgo hasta que el jugador sale al campo para participar en plenitud con el equipo’, admitió D’Antoni. ‘Pero los doctores fueron los que dieron la luz verde y por lo tanto esto se trata de simple mala suerte’.

Los Lakers desde que Bryant volvió con el equipo no habían mejorado en su juego y por el contrario tenían marca perdedora de 2-4 y una global de 12-13, mientras que cuando llegó era ganadora de 10-9.

Los Lakers ocupan en estos momento el undécimo lugar de la Conferencia Oeste, lo que significa que están fuera de la competición de la fase final.

El próximo partido de los Lakers sin Bryant será el que disputen mañana, viernes, en el Staples Center contra los revalorizados Timberwolves de Minnesota, donde tienen a la nueva figura de la NBA, el ala-pívot Kevin Love y al base español Ricky Rubio.