El base Stephen Curry quiso recordar que está seleccionado como titular al próximo Partido de las Estrellas y se encargó de liderar el juego y la remontada de los Warriors de Golden State que vencieron 102-87 a los Bulls de Chicago.

Curry se encargó de dirigir el ataque de los Warriors al anotar 34 puntos (13-19, 4-6, 4-4), repartió nueve asistencias, capturó tres rebotes.

El escolta Klay Thompson también estuvo acertado en el ataque de los Warriors al aportar 22 puntos, incluidos tres triples en seis intentos, que permitieron al equipo de Golden State remontar una desventaja de 16 tantos que tuvieron en la primera parte.

Curry y Thompson establecieron una nueva marca histórica dentro de la NBA después de lograr por trigésimo partido consecutivo anotar al menos un triple cada uno y superaron los 29 que habían conseguido el alero Paul George y George Hill, de los Pacers de Indiana, la pasada temporada.

La victoria, segunda que logran los Warriors (29-20) en los últimos siete partidos disputados en su campo, hizo que sus aficionados se reconciliasen con el equipo.

El ala-pívot Taj Gibson, que salió de titular en el puesto de Carlos Boozer, que fue baja por lesión, encabezó el ataque de los Bulls al lograr 26 puntos, 13 rebotes, repartió cuatro asistencias, recuperó dos balones y puso dos tapones.

Mientras que el base Kirk Hinrich llegó a los 15 puntos que no impidieron la tercera derrota en los cinco partidos disputados fuera de su campo (2-3), de una gira de concluye el domingo cuando se enfrenten en el Staples Center a Los Ángeles Lakers.

El pívot Joakim Noah también aportó siete puntos, 10 rebotes y 11 asistencias.

Noah se convirtió en el tercer jugador de la NBA que consigue esta temporada un doble-doble con rebotes y asistencias, los dos que lo lograron antes fueron el escolta Lance Stephenson y los Pacers de Indiana y el alero francés Nicolas Batum de los Trail Blazers de Portland.

Antes de la remontada de los Warriors, en el Barclays Center, de Brooklyn, las ausencias por descanso que el entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, dio al base francés Tony Parker, y al veterano ala-pívot Tim Duncan, despejó el camino del triunfo que los Nets de Brooklyn lograron por 103-89 frente al equipo de San Antonio.

El alero reserva Alan Anderson encabezó el ataque de los Nets al conseguir 22 puntos, incluidos 19 en la segunda parte que fue cuando el partido se decantó a favor de los Nets, que no superaban la barrera de los 100 tantos en los duelos con los Spurs desde marzo del 2000.

Sin Parker, Duncan, el veterano escolta argentino Manu Ginóbili y el alero Kawhi Leonard, los cuatro mejores encestadores del equipo, los Spurs tuvieron el mérito de mantenerse en el partido hasta el comienzo del partido con sólo una desventaja de cinco puntos.

Lo bueno para Popovich, que el año pasado por haber dado descanso a Parker, Ginóbili, y Duncan, el excomisionado de la NBA, David Stern, lo multó con 250.000 dólares, esta vez no tendrá ese problema añadido al de la derrota.

El base Deron Williams fue el segundo máximo encestador de los Nets al conseguir 16 puntos y se encargó de dirigir el juego al repartir ocho asistencias.

Mientras que el veterano alero Paul Pierce consiguió 12 puntos (5-6, 1-1, 1-1) y siete rebotes que ayudaron a los Nets (22-25) a conseguir el segundo triunfo consecutivo después haber perdido tres seguidos contra equipos líderes de división.

Los Spurs, que se encuentran en su gira más larga del año, la que se conoce como la del ‘Rodeo’, época del año que llega la celebración de la tradicional fiesta tejana en San Antonio, tienen marca de 2-1 en los nueve partidos que van a disputar de visitantes.

El base Cory Joseph, que salió en el puesto de Parker, se convirtió en el máximo encestador de los Spurs al anotar 18 puntos, cuatro rebotes, tres asistencias y cuatro recuperaciones de balón.

Mientras que el escolta Danny Green llegó a los 17 tantos, capturó ocho rebotes, repartió tres asistencias, puso dos tapones y recuperó un balón.