Regresa Tego Calderón con mucho que decir
En el corazón de Santurce, en un segundo piso de la Avenida Fernández Juncos, se ubica El Chinchorro de Chiqui. En su interior, imparte una conferencia de prensa Tego Calderón, El Abayarde, el ícono de la música urbana, que se subirá al escenario del Coliseo Jose Miguel Agrelot el próximo viernes, 28 de agosto, a las 8:30 p.m., doce años despues de que le cantara por última vez a un público masivo en Puerto Rico.
Con esa habitual irreverencia suya, que se salta las normas de etiqueta, que derrumba la formalidad para abrirse a las masas como un pariente, un igual, un colega de letra y música, Tego regresa a uno de los escenarios más importantes de Puerto Rico, luego de rechazarlo en varias ocasiones.
'No quería hacer el Choli, el Choli es muy serio pa' mí, [pero] lo vamos a halar pa' acá, le vamos a quitar un poco la seriedad, la corbata y el lazo', dice. Para complementar la visión del músico querido por varias generaciones, el productor Ender Vega promete un montaje imponente pero a la vez con un diseño diferente para que, aun en el Choli, Tego podrá estar cerca de su público, como un reencuentro entre amigos y familiares.
El concierto, titulado 'La trayectoria', será precisamente un recorrido por la discografía del músico, que inició en el 2005 con el lanzamiento de 'El Abayarde', el cual le valió el apoyo inmediato de una gran masa que se volvió cómplice de sus ritmos distintivos, sus rimas y su 'flow'. Cuatro discos después, mantiene vivo el apoyo de esas primeras generaciones, de la que muchos son niños que crecieron con su música.
Y es que dice Tego que uno de los mayores honores es que la gente aún lo quiera, con sus virtudes y defectos. 'La gente cree que yo soy de su familia, la gente me siente como de ellos, y sufren cuando yo sufro, ríen cuando yo río, cuando tengo éxito se lo gozan conmigo... Nunca me he ido, es una celebración de tantos años', exclama con su voz grave.
Éxitos como 'Cosa buena', 'Métele sazón', 'Pa' que retocen', 'Dando break', entre otros, sonarán en el concierto, que rendirá homenajes a Ismael Rivera y Bob Marley, y recibirá la visita hermana de Vico C y Eddie D, dos grandes en la vida de Tego, y al cual Don Omar, 'el impredecible', como lo llama Tego, probablemente también asistirá. Contarán además con una banda de nueve músicos liderada por Amarilys Ríos que contará con la participación de DJ Adam.
Tego además celebra su regreso a la música, a la creación, con el impulso de tener su propio estudio, con salón de ensayo, donde se encierra durante horas a jugar con los sonidos, generar nuevos sabores, con un pie en el reggeaton, en el hip hop, en la bomba, en la salsa, en toda esa herencia de ritmos africanos y caribeños combinadas con la experiencia sonora urbana.
El percusionista, que se crió al son de Ismael Rivera, se estrenó como baterista de una banda de rock, y cuyo padre tocaba jazz, seguirá provocando el algunas ocasiones la angustia de los puristas de la música, tomando riesgos y probando nuevas posibilidades, con ese ritmo forjado a base de tropiezos y de ir contra la marea. Como combinar el ritmo de bomba más lento con algunos sonidos brasileños para crear una especie de perreo. 'Los puristas de la salsa me van a regañar', admite.
De igual forma, Tego se ha destacado como un reggeatonero con sustancia, que aprovecha el ritmo contagioso de su música para denunciar la pobreza, las injusticias sociales, la discriminación, la condición política de Puerto Rico, en una radiografía social del barrio, de la calle. A pesar de que en el momento siente la necesidad de decir las cosas más 'en arroz y habichuelas', con menos versos,- dice que antes se 'rompía demasiado la cabeza'-, seguirá buscando transmitir un mensaje.
Con su manera propia, anclada en el hip hop, busca seguir hablando de la violencia en Puerto Rico, de los momentos agitados que se están viviendo, de la intolerancia de los jóvenes, del desorden que hay en la calle, como en la canción 'Me tienen arisco'. Y de repente, habla de su hermanito, que hace poco recibió un disparo, que empezó a escuchar una canción y Tego después no sabía si el joven escucharía el final. Ese Puerto Rico en el que estamos viviendo.
'Es Tego después de ocho años sin decir nada', comenta quien tiene mucho que decir.
Y de regreso a la música, Tego aprovecha la oportunidad para alegrarse por el éxito de Pirulo y la Tribu, y de La Tribu de Abrante, quienes formaron parte de su propia tribu, se alegra de eso y de la rumba que los une, de la base del tambor. 'Los ritmos caribeños están triunfando', dice. No obstante, se abstienede comentar de los reggeatoneros de esta generación. Prefiere no escucharlos, porque es como la espuma y se le pega el flow, comenta.
Ya los periodistas no tienen más preguntas. Van a dar por terminada la conferencia de prensa, pero Tego toma el micrófono nuevamente. 'Quiero decirle al público que va a ser una noche muy especial, voy a dejar todo lo que tengo ahí, hace tiempo que no estoy con mi pueblo, [y lo haré] con cariño como que es pa' tu mamá, pa' tu familia, tu abuelita, pa' tu gente, con ese amor es que estamos haciendo este concierto, con ese respeto a esa tarima, honrar a quien honor merece', dice. 'Hay Abayarde para largo', se despide.
* Nota del editor: Nombres de productor, entre otros, fueron corregidos luego de publicación.