Hacer cosas incómodas delante de la pareja resulta un poco difícil, pero una vez se logra, los lazos de confianza y unión crecen.

Así lo confirmó Leah DeCesare, quien publicó un artículo en el portal cibernetico Family Share, donde relata la primera vez que se tiró un pedo (gas estomacal o flatulencia) frente a su marido.

La autora del libro ‘Naked Parenting: 7 claves para criar niños con confianza' explicó que en un matrimonio sólido reina el sentido de seguridad, aceptación, honestidad y libertad compartida e individual.

La mujer, quien contrajo nupcias a los 20 años y es madre de tres niños, se ha dedicado al estudio de la crianza de menores y las relaciones de pareja por la pasada década.

'Con todo el tiempo que llevamos casados mi esposo recuerda el primer pedo que me tiré frente a él. La acción cambió nuestra relación para siempre. Él cuenta la historia de ese momento con mucho entusiasmo y asegura que en ese momento supo que iba a estar casado conmigo por siempre', lee la publicación de DeCesare.

Dijo que cada vez se pregunta cuan importante puede ser el acto y recordó que el mismo fue accidental porque siempre trató de evitarlos.

'Tan pronto crucé esa línea intima le di permiso para que él se tirara todos los pedos posibles delante de mí. Esto podría convertirse en una tortura en ocasiones, pero lo cierto es que me da la oportunidad de apreciar mi libertad dentro de la relación y me da licencia para ser yo misma hasta en los detalles más pequeños', agregó.

La escritora insistió en que las flatulencias no son compartidas entre mujeres, amigos o familiares como posiblemente logran con mayor confianza los hombres. Casi siempre el acto surge como accidente o cuando en realidad no se puede evitar.

'Las mujeres tratan de ocultarlo más que los demás, pero con nuestro maridos debemos dejarlos salir sin problemas. Las invito', afirmó.

Eliminar gases naturalmente es saludable y no lo es ignorar, esconder o aguantar el impulso.

'Compartir un pedo es tan normal como reír, girar la cabeza y llorar. Porque no compartirlo con la pareja', agregó en el escrito.

Según citó en su artículo, el Dr. Oz le confesó que biológicamente aguantar una flatulencia no es terrible para la salud, pero puede causar dolores abdominales y cólicos.

'Es un hecho científico que las mujeres y los hombres pasan la misma cantidad de gas en un día - casi medio litro. (Se va a tener que salir en algún momento)', indicó.

Destacó que los pedos frente al ser amado pueden convertirse en una prueba de 'hasta donde llegará la relación' en términos de la confianza que se profesen.

'Al fin y al cabo juraron amor en las buenas y en las malas. Haga de su matrimonio uno perdurable, constante y completo. Tenemos que ser honestos', añadió.