El vídeo digital democratiza la producción pero no la distribución
Varios directores que presentan sus primeros trabajos estos días en el Festival de Cine Latino de Chicago coinciden en que el uso del vídeo digital ha democratizado la realización de películas, pero no la postproducción y distribución que continúan siendo los mayores obstáculos.
'Ahora es más sencillo producir una película, pero no terminarla y compartirla', dijo a Efe el cineasta mexico-guatemalteco Julio Hernández Cordón, director de 'Polvo'.
El realizador reclamó apoyos financieros estatales y privados, así como de leyes que favorezcan la producción cinematográfica y no obliguen a buscar 'una distribución diferente a lo comercial'.
'Polvo', que todavía no se ha estrenado comercialmente en Guatemala, fue invitada a la vigésimo novena edición del festival de Chicago después de ganar el premio a la Mejor Película en el Festival de Toulouse (Francia) semanas atrás y por su participación en 2012 en las competiciones oficiales de Locarno (Suiza) y Toronto (Canadá).
A su vez, el mexicano Carlos Gómez Oliver, autor de 'El ombligo del cielo', dijo a Efe que 'la exhibición en salas está sumamente acotada por los distribuidores que prefieren los 'blockbusters' norteamericanos'.
Gómez, que filmó su película en formato digital con un presupuesto de $400,000 dólares y con la intención original de estrenarla en televisión, aclaró a Efe que la tecnología le permitió trabajar 'sin presiones de escasez de material', pero luego tuvo que enfrentar 'el reto más importante', que es la distribución.
En su caso está explorando la distribución nacional en salas de circuitos culturales, además de la salida posterior en DVD y el 'streaming'.
Para Gómez, Chicago es su primer festival internacional y además del 'orgullo de compartir pantalla con producciones Iberoamericanas de calidad', declaró estar confiado en que podrá mostrar que 'una película realizada en condiciones acotadas puede tener un impacto mayor al esperado'.
En Ecuador la tecnología digital también ha creado formas más ágiles de crear cine y de participar en festivales como el de Chicago, 'para mostrar la diversidad cultural que existe en nuestro país', dijo David Nieto Wenzell.
Este quiteño, que comenzó en 2004 con un grupo de amigos que querían realizar cortos, llegó ocho años después a su primer largometraje, 'La llamada', una coproducción con Argentina y Alemania que ganó el premio de distribución del Consejo Nacional de Cine ecuatoriano.
Esto resultó vital para que la película fuera estrenada en Ecuador en septiembre de 2012 y en Argentina en enero de este año.
Según Nieto, el apoyo del Consejo Nacional de Cine de Ecuador es clave para los proyectos cinematográficos del país porque facilita el acceso a fondos y coproducciones.
El realizador explicó a Efe que el cine ecuatoriano ha tenido un proceso 'esporádico, difícil y laborioso', ayudado por el avance de la tecnología digital.
Para otros, como el colombiano Andrés Burgos, los problemas para concretar una 'ópera prima' pueden superarse con la ayuda de un guión que atraiga a una figura de renombre internacional.
Esto ocurrió en su caso como guionista y director de la película 'Sofía y el terco', basada en una novela que escribió y adaptó para el cine, con la actriz española Carmen Maura, que viajó a Colombia atraída por el guión.
La novedad es que se trata del primer papel protagonista donde la actriz, que cuenta en su repertorio con cuatro premios Goya y un premio a la mejor actriz en Cannes, no habla ni una sola palabra.
Interpreta el papel de Sofía, una señora de 75 años que vive en un pueblecito de los Andes y que nunca ha visto el mar. Durante muchos años, su marido le ha prometido ir al Caribe, pero siempre surgen motivos que obligan a aplazar el soñado viaje.
Burgos considera que su participación en el festival de Chicago, que se extenderá hasta el 24 de abril con la exhibición de más de 100 películas, además de formar parte de una tradición y un prestigio, es también 'una oportunidad para conocer otros títulos de Latinoamérica que no siempre logran traspasar las fronteras de nuestros países'.