El astronauta boricua Joseph Acaba todavía está en proceso de acoplarse al cambio de gravedad tras haber aterrizado recientemente en Kazajistán luego de una misión espacial a bordo de la nave rusa Soyuz TMA-04M, por los pasados cuatro meses, mientras desea que los humanos puedan viajar al espacio.

'Es una experiencia muy buena y me gustaría que los niños de hoy también puedan ir al espacio porque los seres humanos necesitan vivir en el espacio y viajar al espacio. Creo que en el futuro vamos a hacerlo más común', dijo el astronauta en entrevista vía satélite desde Houston, Texas con un noticiero televisivo (Univision).

Acaba, quien espera estar recuperado 100 por ciento a finales de esta semana y que viajará la semana próxima a Rusia, relató cómo se siente tras su regreso a la Tierra.

'Tengo como un dolor pequeño en la espalda porque los músculos están apretados y también en la cabeza porque es como estar en un bote por par de meses y después caminar en la Tierra', detalló al indicar que planifica venir a Puerto Rico en noviembre.

La Soyuz tocó tierra el pasado 17 de septiembre a 80 kilómetros al noreste de Arkalyk, una ciudad de cerca de 30,000 habitantes localizada al centro de Kazajistán. Acaba visitó la Estación Espacial Internacional (EEI) junto a los cosmonautas rusos Guennadi Padalka y Serguéi Revin. En la plataforma orbital permanecen la astronauta estadounidense Sunita Williams, el japonés Akihiko Hoshide y el ruso Yuri Malenchenko.

El astronauta comparó el aterrizaje de la cápsula con un accidente vehicular. 'No es un aterrizaje como en un 'shuttle'. Es como un accidente en un carro. Creo que llegamos a 22 millas por hora en el impacto. Es fuerte pero es inmediatamente. Fue bien y me siento muy bien', sostuvo.

Sin embargo, dijo que no es difícil estar en el espacio porque el cuerpo se ajusta a la gravedad. 'Es un poquito diferente porque las cosas están flotando y se pueden perder. Pero me gusta la experiencia y quiero volver pronto', indicó.

Por otro lado, expresó su orgullo y emoción al ver la Isla desde el espacio y poder tomarle fotografías que fueron circuladas por las redes sociales. 'Me siento bien por eso. Es un orgullo y ver la Isla del espacio es increíble y las fotos no son tan buenas como verlo en vivo', explicó.