Frustrado Torrealba con lentitud en su juicio a WIPR
El productor Ángel 'Junior' Torrealba continúa frustrado con el tiempo que le ha tomado resolver en los tribunales, la demanda que sometió contra la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública (WIPR) por derechos de autor y plagio sobre su programa 'Al son del Caribe'.
En una vista que se celebró hoy en el Tribunal de Primera Instancia de San Juan, la jueza, Wanda Cruz Ayala, escuchó argumentos de la parte demandante y de la parte demandada sobre una moción de desestimación y otra de sentencia sumaria, sometidas por los representantes de la corporación y las oposiciones de los abogados de Torrealba.
El abogado Edgardo Díaz, quien junto con los licenciados Zoé Laboy y Ángel Cintrón, encabeza la representación del productor, insistió en los daños morales que supuestamente se le causaron a su cliente al haberse utilizado su obra, y luego haberse modificado.
El productor alega que ediciones del programa de su creación 'Al son del Caribe' se transmitieron por el canal sin autorización y que el contenido se alteró, dañándose el producto.
A su salida de sala, Torrealba sostuvo que el contrato que en principio firmó con WIPR establece que es él quién tiene los derechos a perpetuidad del producto, pero que ni siquiera ha podido venderlo porque no se lo han dado. 'Yo soy el dueño del programa y no puedo venderlo en Estados Unidos porque no me lo dan y llevo cinco años perdiendo dinero', argumentó.
Señaló que fue él quién se encargó de vender el programa. 'El canal no hizo nada. Todo el trabajo lo hice yo, con mis cámaras, con mis empleados, con mis editores, con mis equipos, con mis luces, con mis sonidos'. Entonces, explicó, no ha podido venderlo en canales en Venezuela y en isla Margarita porque, estos, luego de ver el producto que modificó WIPR, le han dicho que 'esto no sirve, porque (en WIPR) cambiaron el concepto y eso no era… Sin permiso usaron mi música, que es mía, que la pagué yo, que la escribí yo'.
Estableció que sigue sintiéndose igualmente frustrado que cuando comenzó el proceso.
'Tú te crees que yo me puedo sentir bien con un presidente en la Junta de Directores, que botan una muchacha el otro día, una compañera que respeto mucho, Gricel Mamery, y el presidente de la Junta, corrió y rápidamente, en auxilio de ella, se sentó (a hablar). Él no me ha llamado a mí en cinco años ni siquiera para ver si necesito una botella de agua. Eso son cosas que duelen', expresó Torrealba, quién en noviembre de 2010, siendo paciente de cáncer de colon, llevó a cabo una huelga de hambre a las afueras de la estación del gobierno reclamando que se le pagara por este daño.
Los abogados de Torrealba indicaron que es imprecisa la fecha en que podría resolverse el conflicto, pero adelantaron que se verá el juicio en su fondo, por lo menos en algunos de los argumentos presentados.
El abogado Cintrón señaló que 'hay algunas controversias que son evidentes, que son obvias y que no se han argumentado, como la violación de contrato'.
'La argumentación de que se violó un contrato, como en efecto se violó, no escuchamos hoy una argumentación profunda sobre eso, lo que nos quiere decir a nosotros que para el tribunal es bastante obvio que siguen existiendo, claramente, unas controversias que se tienen que resolver en el juicio en su fondo en todas esas partes, y tendrá entonces que sopesar los argumentos expuestos', abundó.
El aspecto en el que la parte demandada está levantando más argumentos es en la cuestión de si tenía Torrealba derechos morales por la alteración del programa.
En 40 o 50 días la jueza deberá recibir los proyectos de sentencia y resolución de las partes demandadas y demandantes respectivamente, para decidir sobre qué controversias se verá juicio en su fondo.