El coordinador sindical de la Unión Bonafide de Oficiales de Seguridad de la Universidad de Puerto Rico (UBOS), Julio Vargas Cruz, dijo el miercoles, que en medio de una huelga, no se puede utilizar a los oficiales de seguridad privados para reabrir los portones de la UPR.

'El conflicto obrero patronal que mantiene en vilo a los trabajadores de distintos sindicatos y representaciones junto a la Administración de la Universidad de Puerto Rico en momentos donde se debate la apertura de portones, es una clara instancia de un proceso conflictivo que envuelve a los Guardias Universitarios que representamos. Esto configura el otro postulado establecido en la ley sobre la prohibición hacia las compañías privadas', dijo Vargas Cruz en declaraciones escritas.

'Por último, por este medio, le señalamos públicamente a la Administración Central de la Universidad de Puerto Rico y a toda compañía privada de seguridad, que desista de sus intentos de violentar la ley el orden establecido por nuestro ordenamiento jurídico ya que de continuar con dicha postura, estaremos procediendo con la radicación de querellas pertinentes en contra de cada Oficial de Seguridad Privado que intente desestabilizar la seguridad y paz laboral que debe imperar en la Comunidad Universitaria', añadió.

Sin embargo, en una misiva dirigida a Vargas Cruz, el presidente de la empresa Capitol Security Police, Miguel Portilla, respondió que las expresiones del presidente de UBOS solo revelan y demuestran 'la posición mal intencionada e insensible del organismo que usted representa en tan delicado momento histórico que atraviesa nuestro país'.

Vargas Cruz entiende que como representantes sindicales de los Oficiales de Seguridad I y II pertenecientes a la Guardia Universitaria, es necesario repasar y orientar tanto a la Administración Central de la Universidad de Puerto Rico como a cualquier compañía privada que brinde servicios de seguridad y haya contemplado aceptar contratación especial en momentos donde se mantiene una Política de Convivencia y No Confrontación en la Comunidad Universitaria.

En su carta, Portilla afirma que lamenta 'que sea la posición de su organismo y los miembros de su matrícula el limitar y coartar cualquier esfuerzo bonafide que realice la Universidad de Puerto Rico para cuidar y proteger a los estudiantes, su personal, propiedad y bienes, dejando claro que ustedes solo ostentan en la descripción de la plaza que ocupan el título de seguridad, mas no así honran su trabajo, no valiéndole su completa inacción y falta de diligencia en el cumplimiento de sus funciones durante esta crisis…'

Portilla aseguró que su empresa continuará cumpliendo 'su deber' y defenderá a sus empleados de cualquier querella y 'falsas imputaciones' que se puedan presentar.