Se declara culpable el único acusado que quedaba por asesinato de Spagnoletti
Álex Burgos Amaro aceptó culpa por narcotráfico, pero no por el asesinato del exejecutivo del banco Doral en 2011.
El hombre que quedaba por enjuiciar por el asesinato del banquero Maurice Spagnoletti en 2011 se declarará culpable por narcotráfico, pero no por el asesinato del ejecutivo.
La abogada Anita Hill Adames avisó el martes al juez federal Francisco Besosa Stubbe que su cliente, Álex Burgos Amaro, llegó a un acuerdo con la fiscalía y el juez señaló rápidamente una vista para este jueves en la que se formalizaría el acuerdo.
Según la moción de Hill Adames, el hombre acepta culpa por el cargo de narcotráfico y uso de armas de fuego, pero la fiscalía accede a desestimarle el cargo por el asesinato de Spagnoletti.
Burgos Amaro fue acusado junto al grupo de cinco que enfrentó juicio, pero no estuvo con ellos en el proceso el pasado abril y mayo porque su abogada atravesaba una situación personal que le impedía atender el caso.
Al emitir el veredicto, el jurado no decretó culpabilidad en todos los cargos. De hecho, sobre la muerte de Spagnoletti, absolvió a uno de los cuatro que fueron involucrados. El cuarto acusado por la muerte era Burgos Amaro, por lo que quedan convictos por esa ejecución solamente Rolando Rivera Solís y Yadiel Serrano Canales.
Aunque no estuvo en el juicio, el jurado escuchó testimonio con relación a Burgos Amaro. Milagros Pérez, exnovia del acusado principal, Rivera Solís, dijo que Burgos Amaro la había llamado en junio de 2011 a decirle que le habían encomendado un “ebo” en la calle y que “el Viejo se va”. “Ebo” es un término de la religión Yoruba, a la que pertenecían los acusados, que implica una “limpieza”. La mujer, quien había tenido una relación con Burgos Amaro, le dijo al jurado además que el hombre le confesó que no había participado directamente de la “limpieza”, pero que había hecho la llamada para que los participantes del asesinato supieran que el ejecutivo había salido de la sede del banco en su carro y que llevaba globos en el mismo. Spagnoletti fue asesinado a tiros mientras conducía su Lexus negro en la entrada del Túnel Minillas.
La fiscalía no presentó evidencia directa de cómo ocurrió la muerte sino evidencia circunstancial, tal como el testimonio de Pérez y otro que daba cuenta de que antes de la muerte se le habían entregado armas de fuego a dos hombres en la casa de Rivera Solís y que, después de la muerte, hubo una celebración también en esa casa de Trujillo Alto.
Las sentencias de los convictos no tienen fecha señalada todavía y el juez tiene pendiente una petición de fiscalía para que, como parte de la sentencia, a los convictos se les ordene restituir casi $2 millones en daños a la viuda e hija de Spagnoletti.
Vea:
Fiscalía quiere que convictos por muerte de Spagnoletti paguen gastos de viuda e hija