Presidente de Junta de la Inter “nos ha hecho pasar por un duro calvario”
Reacciona exayudante de expresidente de la Universidad Interamericana a controversias legales con la Junta de Síndicos de la institución educativa.
Dominique A. Gilormini de Gracia, catedrático auxiliar de la Facultad de Derecho de la Interamericana y ayudante ejecutivo del destituido expresidente de la Inter, Manuel Fernós López-Cepero, dijo que se mantiene confiado en que en los tribunales se podrá aclarar y establecer la verdad detrás de su destitución, y la de su exjefe, la cual atribuyó a un “montaje con agendas muy oscuras” de parte del presidente de la Junta de Síndicos, José R. Muñoz Ávila.
Tras su destitución hace poco más de un año, Gilormini de Gracia sometió una demanda en el Tribunal de Primera Instancia que el foro no acogió por entender que no era el momento para activar a jurisdicción del tribunal. Pero el abogado mantiene una reclamación laboral contra la institución educativa en el tribunal federal y, el 23 de marzo pasado, la jueza Iris Cancio González sacó a ambos, Gilormini de Gracia y Fernós López-Cepero, de una demanda que la universidad sometió alegando que, junto al suplidor MAP Strategies, habían cometido irregularidades y faltado a su deber de fiducia.
La jueza encontró que cualquier reclamación que tuviera la Interamericana sería solamente contra el suplidor y no contra sus exgerenciales porque, a estos no les aplicaba el deber de fiducia porque no eran ni directores ni oficiales, según el término está definido para este tipo de reclamación. Además, concluyó que cualquier posible reclamación contra estos estaba prescrita.
En ese caso, queda viva más inmediatamente una disputa entre el suplidor y la universidad porque el primero está pidiendo en descubrimiento de prueba el informe investigativo del licenciado Rolando Emmanuelli Jiménez que supuestamente fue base para las acciones contra los exgerenciales y para concluir incumplimiento de parte del suplidor, pero la universidad se resiste a entregarlo, a pesar de una orden de la jueza para que lo entregue. En reconsideración, la jueza determinó que iba a celebrar una vista como parte de la que podría examinar el documento en su despacho para evaluar si aplicaba alguna orden protectora que evite la divulgación del mismo fuera de las partes en el caso.
“No me sorprende la determinación judicial de desestimar el caso radicado por el Presidente de la Junta de Síndicos en mi contra. El Tribunal me dio la oportunidad de que se evaluara de manera justa e imparcial las alegaciones conclusorias en una demanda frívola y sin haber podido establecer una reclamación que justifique un remedió. Contrario a lo que hizo la Junta de Síndicos que procedieron injustamente, basando sus actuaciones equivocadas en rumores y falsos testimonios anónimos y negándome la oportunidad de responder y aclarar cualquier duda que tuvieran”, reaccionó Gilormini de Gracia.
“El Presidente de la Junta de Síndicos de la Interamericana nos ha hecho pasar por un duro calvario, a mí, a mi esposa y a mis dos hijos. Como abogado y fiel creyente en que los Tribunales tienen como único objetivo la búsqueda de la verdad, confío en que en los procesos judiciales que faltan seguirá saliendo a relucir la verdad y que se hará justicia conmigo y mi familia. Desde un principio he dicho que todo esto es un montaje con agendas muy oscuras. La luz del sol siempre limpia y aclara. Estoy convencido que la verdad saldrá victoriosa”, concluyó.
Su abogado, Guillermo San Antonio Acha, acusó a la junta de pretender “solamente imputarle malos manejos en la opinión pública basado en el informe (investigativo) pero no producirlo al interior del tribunal y del proceso que ellos mismos instaron”. “Nos veremos en el Tribunal de Apelaciones”, dijo sobre la intención ya anunciada de la institución educativa de recurrir al foro apelativo para revocar la desestimación de la demanda contra los exgerenciales.
Sobre el informe investigativo, la Interamericana ha planteado en mociones que no se opone a entregarlo a MAP, pero quiere evitar que el contenido del mismo llegue a “personas malintencionadas (que) intenten fabricar un escándalo público, dañar la imagen de la UIPR y puedan afectar a terceros ajenos a este pleito”. Sobre la desestimación de la demanda contra sus exgerenciales, dijeron al tribunal que interesan enmendar el pliego para especificar que estos servían en sus posiciones por virtud de contrato, por lo que la causa de acción no estaría prescrita.
Fernós López-Cepero mantiene de manera separada un proceso de arbitraje bajo los términos de su contrato para dirimir sus reclamaciones en cuanto a la institución. Gilormini de Gracia es también promovente de una querella en la comisión acreditadora Middle States (MSCHE en inglés) que imputa a la Junta y a Muñoz Ávila violentar los criterios de acreditación al intervenir directamente en los trabajos de administración y al incurrir en conflictos de interés con suplidores de la universidad en perjuicio de la institución.
Fue después de esa querella que la Interamericana desató la demanda que imputa negligencia a sus exgerenciales en el manejo del contrato de MAP, un suplidor que rindió trabajos a la institución para monitoreo y protocolos de seguridad por la pandemia del covid-19.
Vea:
Querella contra la Inter detalla intromisiones y conflictos de interés del presidente de su Junta