Santamaría, conectado hasta en el Supremo, primero apostó a Carmelo Ríos en Guaynabo
Tras discusión de moción de última hora para desestimar cargos, comienza el juicio contra exalcalde de Guaynabo.
Las exposiciones iniciales del Departamento de Justicia federal y de la defensa en el juicio federal por corrupción contra el exalcalde de Guaynabo, Ángel Pérez Otero, dejaron claro que la figura principal en la discusión va a ser el convicto contratista Oscar Javier Santamaría Torres y la red de influencia política que desarrolló en Puerto Rico en todas las ramas de gobierno, incluyendo el Tribunal Supremo.
Esta primera interacción de los jurados con los abogados ocurrió minutos después del mediodía porque las partes estuvieron parte de la mañana en el despacho de la jueza Aida Delgado Colón discutiendo una moción confidencial que la defensa sometió el miércoles en la noche pidiendo la desestimación de la acusación por conspiración, soborno y extorsión. La jueza concedió algunos aspecto de la moción, pero no la desestimación, supo NotiCel, por lo que el juicio prosiguió.
Por Justicia federal, el fiscal Nicholas Cannon dijo a los jurados que este caso es sobre “avaricia y poder” y que durante aproximadamente una semana tendrían “asiento en primera fila”, incluyendo testimonio directo de Santamaría Torres sobre cómo “estaba dando sobornos a lo largo de toda la isla entre 2016 y 2021”. El testigo y el acusado se conocieron, añadió, desde hace 20 años cuando ambos trabajaban en la Cámara de Representantes, donde el testigo era asesor y el acusado era representante y presidió la Comisión de Hacienda.
Pero, a pesar de la amistad, a la hora de la elección especial de 2017 para escoger al sustituto de Héctor O’Neill, el contratista “respaldó a Carmelo Ríos y la relación (con Pérez Otero) se fracturó”. Ahí, adelantó Cannon, entró en acción otro convicto que prestará testimonio, el exalcalde de Cataño, Félix David “El Cano” Delgado Montalvo, quien “ayudó a que (el contratista y el acusado) se reconciliaran”.
El acuerdo, según Cannon, fue que Santamaría Torres hiciera pagos de $5,000 en efectivo a Pérez Otero a cambio de conseguir y mantener contratos para la compañía de construcción, Island Builders, la cual acabó teniendo $2 millones en contratos en Guaynabo. Los pagos eran siempre la misma cantidad, siempre en efectivo, siempre dados en el carro de Santamaría Torres o “literalmente por debajo de la mesa en un restaurante” y por lo menos tres de ellos quedaron grabados en el verano de 2021. De hecho, en una de las grabaciones, el entonces alcalde toma el dinero y lo esconde en su media.
La fiscalía traerá a testigos del Departamento de Hacienda, de la Oficina del Contralor Electoral y de la Oficina de Ética Gubernamental que dirán que ese dinero el acusado nunca lo reportó “porque son sobornos ilegales hechos en secreto”. El presidente de Island Builders también testificará por el gobierno.
Por su parte, el abogado defensor Osvaldo Carlo Linares se dirigiró al jurado para prometerles, en español, que presentarán testigos con los que podrán establecer que “hay dos lados de la moneda”. No anticipó que su cliente fuera uno de esos testigos de defensa, pero sí que traerán a “gente que el gobierno no va a traer”, como funcionarios del municipio que pueden decir el manejo con todas las de la ley que tuvieron los contratos y los pagos a Island Builders. Mientras que, todavía después de convicto, la empresa de Santamaría Torres, Waste Collection, mantiene contratos públicos, en Guaynabo no tiene ninguno, apuntó el abogado.
Carlo Linares abrazó completamente que, en efecto, su cliente recibió donativos políticos de Santamaría Torres “y la manera en que pasó es ilegal en Puerto Rico, pero pasa”. Aseguró que el dinero fue pasado a la campaña y reportado de la misma manera que se reportan otros donativos que se pasan del límite de ley, que es inventando donantes. Pero insistió en que a cambio de esos donativos su cliente no le dio ningún trato especial a Santamaría Torres en cuanto a contrataciones públicas.
El abogado separó buena parte de su alocución para hablar sobre el poder económico y político que amasó Santamaría Torres desde que llegó a la isla a estudiar en el Recinto de Mayaguez de la Universidad de Puerto Rico con una beca de fútbol. “Vamos a estar hablando mucho” de ese testigo, dijo.
Desde que el exalcalde de Cidra, Javier Carrasquillo Cruz, le dio un contrato de recogido de escombros sin tener ninguna experiencia en eso, Santamaría Torres llegó a amasar $150 millones en contratos públicos. “¿Qué poder obtuvo con esos $150 millones? Mucho, se sentaba con gobernadores, se podía sentar con el presidente del Senado, con el presidente de la Cámara de Representantes, con la Comisionada Residente y era amigo cercano de varios jueces del Supremo de Puerto Rico… y ese es el poder con el que se tuvo que enfrentar Ángel Pérez cuando corrió para alcalde de Guaynabo”, argumentó.
Al final, dijo a los jurados, van a tener que escoger a quién creerle y “si le van a creer a ‘El Cano’ Delgado y a Oscar Santamaría”.