El agente federal a cargo de investigación contra Sixto Díaz Colón admite no hay textos de productor exigiendo dinero a exfuncionario y que no se transcribió primera grabación encubierta hecha al productor.

El testimonio del agente del Negociado Federal de Investigaciones (FBI), Juan Carlos López Velázquez, terminó esta mañana tras un contrainterrogatorio accidentado durante el que el abogado defensor, Rafael Castro Lang, intentó llevarlo a establecer elementos que la fiscalía no ha usado en el caso, como la primera grabación encubierta que hizo el querellante, el exsecretario de Asuntos Públicos, Anthony Maceira Zayas, y que el productor tenía un acuerdo con el comité del exgobernador, Ricardo Rosselló Nevares, para “control de daños” por la publicación del chat de Telegram.

Hoy es el sexto día del proceso criminal federal contra el productor de radio y televisión, Sixto Jorge Díaz Colón, quien está acusado de extorsión, intento de extorsión y obstrucción a la justicia por supuestamente exigir $300,000, la reanudación de dos contratos y dinero para pagar “influencers” a cambio de que Raúl Maldonado Nieves, hijo del exsecretario de Hacienda, Raúl Maldonado Gautier, no divulgara más chats dañinos a la Administración Rosselló como el que se divulgó el 13 de julio de 2019 , que desembocó en la renuncia de Rosselló Nevares.

La teoría de la fiscalía tiene dos etapas. Que el 21 de junio Díaz Colón pidió a Maceira Zayas el dinero y otras concesiones a cambio de intervenir con Maldonado Nieves para que no divulgara el chat de Telegram y que, el 16 de julio, después de divulgado, el productor quería dinero para entregar a Maldonado Nieves y evitar que salieran más chats.

El día comenzó con la expectativa creada el viernes de que la fiscal Myriam Fernández expondría problemas financieros que sufría el productor al momento en que tuvo las conversaciones con Maceira Zayas y con los agentes que lo visitaron a su casa a incautarle el teléfono el 26 de julio. Del informe de crédito resaltó que tenía atrasado aproximadamente siete meses de hipoteca y uno del préstamo de auto. Nada se le presentó al jurado sobre supuestas deudas con el Servicio de Rentas Internas federal.

La fiscal también introdujo mensajes de texto de Díaz Colón a Maldonado Nieves el día antes de la primera reunión con Maceira Zayas, dos días después del almuerzo con el funcionario, el día del despido fulminante de Maldonado Gautier y el día antes de la segunda reunión con Maceira Zayas. Por ejemplo, el día del despido de Maldonado Gautier, el productor escribe al hijo de este: “Este mierdero me tiene loco. Tenemos q actuar con sabiduría. Dónde estás hermano. Papi q vas a hacer. Necesito verte”.

La fiscalía no presentó con este testigo uno de las piezas de evidencia centrales en el caso, el contenido de la llamada que Díaz Colón hizo a Maldonado Nieves en la tarde del 26 de junio en su casa ante la presencia de los agentes en la que, por dirección de estos, el productor le habría preguntado sobre el pago de $300,000 y Maldonado Nieve habría rechazado que le interesara el dinero, afirmando que lo único que quería era venganza contra la Administración Rosselló por el trato a su padre.

El contrainterrogatorio estuvo marcado por objeciones de la fiscalía y dificultades del abogado para introducir evidencia y mantener una línea clara de preguntas al testigo. Un punto que logró establecer al jurado es que no hubo conversaciones entre su cliente y Maldonado Nieves del 13 al 25 de julio, aunque el agente sí estableció que llamadas no, pero mensajes sí. Aún así, le admitió al abogado que en ninguno de los mensajes o correos electrónicos examinados durante la investigación se menciona una exigencia de pago de $300,000.

Castro Lang también estableció que el FBI recibió la grabación que Maceira Zayas hizo con su teléfono del almuerzo con Díaz Colón el 21 de junio, que se escuchaba, que la examinaron para la investigación, que la misma era “pertinente”, pero que no la transcribieron. El juez no permitió que el abogado hiciera preguntas sobre esa grabación que no ha sido presentada en evidencia. Tampoco se permitió que el agente contestara sobre lo que pasó en la llamada del 26 de junio del productor a Maldonado Nieves, pero su relato disputa la versión de Díaz Colón de que fue “coaccionado” a hacer la llamada. Esa alegación de coacción está formalmente presentada como queja contra los agentes ante el Departamento de Justicia federal en un proceso interno que corre separado e independiente del juicio.

Según el agente, no se le informó a Díaz Colón que era objeto de la investigación. “Estábamos investigando”, se limitó a contestar al abogado defensor. Añadió que obtuvo consentimiento escrito del acusado para examinar los mensajes de texto entre él y Maldonado Nieves en el teléfono del productor y tomaron nota de lo mismos. Durante la intervención de unas cuatro horas y media con el productor, el agente indica que fue el propio acusado el que mencionó a Maceira Zayas y el pago de los $300,000. Cuando le preguntaron si Maldonado Nieves podía corroborar eso, “tiró el celular sobre la mesa y dijo: llamémoslo”. El agente rechazó también que hubieran ordenado a la esposa del acusado a mantenerse encerrada en uno de los cuartos, lo cual es otro elemento en la querella contra el FBI.

El abogado estableció que la llamada a Maldonado Nieves se realizó a las 5:15 pm y que la orden de incautación que tenían para obtener el teléfono se le entregó a su cliente entre 5:35 y 5:40 pm. El momento en que Díaz Colón dejó de tener control de su teléfono es crucial para establecer el cargo de obstrucción de la justicia, ya que este se basa en que el acusado supuestamente borró mensajes con Maceira, pero la única prueba para establecer esto es una captura de pantalla que el exfuncionario pasó ese mismo día a los agentes que muestra que las 4:00 pm sería la última vez que Díaz Colón habría visto el chat cuyos mensajes estaban borrados.

López Velázquez también afirmó que Maceria Zayas no le había dicho a Rosselló Nevares de los específicos de la discusión con el productor el 21 de junio, lo que es contrario al testimonio del exfuncionario, quien dijo que le había contado al gobernador. Incluso, el exfuncionario relató de anécdota que le dijo al exgobernador que pensaba que lo que planteaba el productor podía ser extorsión y que Rosselló Nevares le afirmó que, en efecto, era una extorsión.

Castro Lang intentó sin éxito que el testigo le dijera si su cliente les había hablado del contrato que tenía con el comité político de Rosselló Nevares para manejar la crisis creada por la divulgación del chat y mencionó a la entidad D.R. Consulting, que sería a través de la cual el comité habría canalizado dos pagos de $90,000 cada uno, según constan consignados en la Oficina del Contralor Electoral.

Vea:

Intervención del FBI con productor Sixto Díaz provoca queja en Justicia federal

Sixto George debía a cada santo una vela durante supuesta extorsión