Desestiman interdicto de la Inter contra su expresidente, pero sigue la demanda regular
La Universidad Interamericana busca que Manuel Fernós entregue archivos de un teléfono celular más de dos meses después de su destitución.
El Tribunal de Primera Instancia desestimó en 24 horas, sumariamente, la petición que hizo la Universidad Interamericana para que se emitiera un interdicto contra su expresidente, Manuel Fernós López-Cepero, con el que buscaban obligarlo a entregar información de acceso para archivos digitales que la institución entiende le pertenecen.
La reclamación de la Interamericana está enmarcada en una pugna con Fernós López-Cepero que se desató el 24 de mayo pasado por razones que todavía no están claras. El interdicto es un recurso legal de naturaleza extraordinaria que requiere que el solicitante convenza al tribunal de que hay daños tan inminentes que se requiere acción legal inmediata sin ni siquiera darle la oportunidad a la otra parte a ser oído.
Pero la reclamación legal llegó al tribunal el 8 de agosto, más de dos meses después de la destitución del expresidente y en las alegaciones no se explica la inminencia ni los daños. En una sentencia el 9 de agosto, la jueza Valerie Concepción Cintrón indicó que "de los hechos expuestos por la Parte Demandante no se desprende tal perjuicio, pérdida o daño inmediato e irreparable como para emitir el remedio solicitado sin notificación a la Parte Demandada o a su representación legal y la correspondiente oportunidad para ser oído". Por eso, proveyó "no ha lugar" al interdicto, aunque mantuvo la demanda como una regular, que se tramita sin la urgencia de un recurso extraordinario.
La determinación de la jueza dejó en entredicho al presidente de la Junta de Síndicos de la universidad, José R. Muñoz Ávila, quien sometió junto a la demanda una declaración jurada en la que afirmó que "de no concederse el remedio de Injunction que se solicita, se le causarán daños irreparables a la Universidad Interamericana".
La acción legal que suscribió el abogado Luis M. Rodríguez López deja claro que está "[p]endiente aún una investigación que la (Interamericana) se encuentra llevando a cabo en estos momentos", con relación a Fernóz López-Cepero. Relata que el expresidente canceló la cuenta de teléfono de su celular oficial y lo sustituyó con una cuenta y aparato personal un día después de que se le notificara que se había iniciado una investigación en torno a su entonces ayudante, el licenciado Dominique Gilormini.
Fernós López-Cepero entregó todos sus aparatos electrónicos oficiales, excepto el teléfono, que había desechado. La demanda sostiene que el manual laboral que le aplica al expresidente indica que los aparatos electrónicos oficiales son propiedad de la institución y que la administración puede tener acceso a los mismos en cualquier momento. En el pleito, específicamente buscan que Fernós López-Cepero entregue las credenciales de acceso al servicio en la nube "iCloud" que tendría el resguardo del celular que desechó, incluyendo mensajes y correos electrónicos.