Juan Fontánez Fuentes, quien no está colegiado en el Colegio de Ingenieros y Agrimensores, se compromete con trabajos que nunca termina y desaparece.

Juan Fontánez Fuentes es músico y también engaña. Se lo puede ver tocando cuatro, como cuando participaba en el grupo Nova Trova, pero también defraudando a personas y empresas.

Muchos han disfrutado con Fontánez Fuentes arriba del escenario, pero también varios han sufrido de sus estafas: son casi 190,000 dólares los que ha obtenido de forma ilegal, a la luz de las demandas sometidas en tribunales.

Para engañar, el sujeto apela a su labia y a que conoce perfectamente cómo moverse en el ámbito de la construcción, y luego de no concluir las obras desaparece dando diferentes pretextos, entre ellos problemas de salud o haber supuestamente participado en las inspecciones de escuelas tras los temblores de enero de 2020, ya que se hace pasar como ingeniero estructural.

El hombre engatusa al hacerse pasar como ingeniero, cuando en realidad no lo es, de acuerdo a documentos oficiales del Colegio de Ingenieros de Puerto Rico.

Una de las personas que confió en él fue Esther González Martínez, a quien el individuo adeuda 12,000 dólares por materiales y trabajos que nunca finalizó, por lo que lo demandó.

“Mi intención con todo esto es que la gente sepa lo que está haciendo este señor a ver si coge vergüenza. Y que reponga el daño hecho. Conmigo se hizo pasar como ingeniero estructural, como lo ha hecho por mucho tiempo. Mi proyecto era abrir el espacio en los bajos de mi casa para hacer un estudio de yoga y un ‘deck’ aledaño al estudio. Pero cuando llegó el momento de hacer el ‘deck’, el hombre se desapareció con mi dinero para materiales, entre aceros para la base y madera”, contó la víctima.

Agregó que “él abandonó el proyecto y hasta los dos empleados que había contratado (de los cuales a uno le debe dinero) no sabían de él. Cuando se comunicaba, era para decir que estaba enfermo. Al final, en noviembre o diciembre de 2021 mi abogada logró comunicarse pero nunca devolvió el dinero. Ya está radicada una demanda por incumplimiento y cobro de dinero. El 19 de mayo fue emplazado finalmente”.

La abogada Mónica Timothée Vega, quien representa a la maestra de yoga, reveló que Fontanez Fuentes también defraudó a un constructor por 40 mil dólares, en un caso que está pronto a presentarse en tribunales, así como a una empresa, Antilles Power Depot, a la que adeuda 137,520 dólares., según una sentencia del tribunal de 2020.

“Este señor se hace pasar por ingeniero colegiado y licenciado y, al final, ha defraudado a varias personas, entre ellas a la señora Gonzalez, pero de seguro son muchos más” afirmó Thimotée Vega.

No satisfecho de sus fraudes, también adeudó en un momento casi 3,400 dólares a su arrendatario, por lo que tuvo que ser desahuciado.

La licenciada señaló que el sujeto, cuando se ve presionado “alega problemas de salud, que es la excusa que le da a todos los clientes cuando no quiere cumplir”.

Y mientras el dinero de muchas personas no aparece, Fontanez Fuentes se mueve como pez en el agua en círculos de la ingeniería del país, pese a que, al no estar colegiado, y de acuerdo con la Ley 173 de 1988, “no está autorizado a ejercer u ofrecer ejercer la profesión de ingeniería y agrimensura, anunciarse o dar la impresión de ser ingeniero o agrimensor, o usar el vocabulario de ingeniero o agrimensor con relación a su nombre o persona”.

Hace dos años, por ejemplo, fue “conferencista” en la Convención de Edificios Comerciales.

Timothée Vega exhorta a las personas a ser responsables a la hora de contratar a personas para proyectos y acudir al DACO, pero también hace un respacacho al Colegio de Ingenieros y Agrimensores de Puerto Rico, a la Policía y al Estado, “que permiten que estas personas engañen”.