Los medios de comunicación esperan por la autorización del Tribunal Supremo para transmitir la vista de mañana.

Un mes después de que el Tribunal de Apelaciones revocó las sentencias de culpabilidad en su contra, Pablo Casellas Toro regresa mañana martes al Tribunal de Bayamón para el inicio del nuevo proceso judicial que enfrentará por la muerte de su esposa Carmen Paredes Cintrón, ocurrida el 14 de julio de 2012 en la residencia de la pareja, en Guaynabo.

En ese mismo recinto, la noche del 22 de enero de 2014, un jurado compuesto por seis hombres y seis mujeres lo encontró culpable del asesinato de su esposa y madre de sus dos hijas. Rindió un veredicto de 11 a 1. Dos semanas más tarde, el fenecido juez José Ramírez Lluch lo sentenció a 109 años de prisión.

Ahora, la jueza Nerisvel Durán Guzmán presidirá la vista sobre el estado de los procedimientos que Wapa TV solicitó transmitir en directo desde el juzgado, en una petición que cobijaría a todos los medios de comunicación del país.

Por tratarse de una vista que no forma parte del Programa Experimental de Cámaras de la Rama Judicial, Wapa sometió una moción ante el Tribunal Supremo, que al cierre de esta edición no había emitido una resolución acogiendo o rechazando la petición.

El licenciado Harry Padilla Martínez indicó a NotiCel que “no” anticipaba que Casellas Toro cumpliera con las condiciones de su fianza previo a la cita en el Tribunal de Bayamón. Ese trámite, según dijo, se completaría durante la semana.

La jueza Marta Rosario Santana impuso a Casellas Toro una fianza de $2 millones. Como parte de las condiciones para quedar en libertad mientras se celebra el nuevo juicio, también ordenó que permanezca bajo arresto domiciliario con grillete y en la custodia de un tercero.

Actualmente el hijo del fenecido juez Salvador Casellas permanece sumariado en la cárcel de Bayamón. En esa prisión extinguía la pena de 109 años de cárcel, que quedó anulada tras una decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos, que instauró el requisito del veredicto unánime.

Durante el primer juicio, que se extendió del 24 de octubre del 2013 al 22 de enero de 2014, el jurado encontró a Casellas Toro culpable de los cargos de asesinato en primer grado, destrucción de prueba y violación a la Ley de Armas. El panel de juzgadores emitió una decisión dividida de 11 a 1.

La decisión del Supremo federal que requiere la unanimidad del veredicto aplica a este caso porque todavía se encuentra en la etapa apelativa. Además, la defensa de Casellas Toro reclamó su derecho a un veredicto unánime desde la moción en que solicitó el juicio por jurado.

La semana pasada NotiCel reportó que el licenciado Juan Ramón Acevedo Cruz ya no forma parte del equipo legal de Casellas Toro.