Día 2 Natal v Romero: tropiezos legales y más irregularidades
Aunque en la demanda de Natal Albelo se habla de 20,418 votos de Unidad 77 que pueden resultar ilegales, durante los dos días de vista no se ha especificado un número, sino diferentes estimados.
Con tres testigos adicionales y un tropezado día, los abogados de Manuel Natal Albelo intentaron subrayar que no hubo control alguno en el manejo de papeletas de voto adelantado en el precinto de San Juan, desde que se tramitaron las solicitudes hasta el conteo de papeletas, de acuerdo a lo ventilado en el segundo día de juicio en su fondo.
La defensa de Natal Albelo, excandidato a la alcaldía de la ciudad capital por el Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), busca conseguir una nueva elección en la Unidad 77 de voto adelantado, que consiste en voto por correo, a domicilio, en precinto y ausente. Como codemandado, figura el alcalde juramentado de San Juan, el exsenador del Partido Nuevo Progresista (PNP), Miguel Romero Lugo, así como la la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) y demás partidos.
Durante la vista —que se extendió desde las nueve de la mañana hasta las casi las seis de la tarde del viernes— se hizo referencia a 17 actas de incidencia elaboradas durante el escrutinio de las elecciones generales, pero la prueba documental no fue incluida como evidencia del caso porque se les hizo difícil digitalizarla. La representación legal de Natal Albelo, los licenciados Manuel Rodríguez Banchs y Tamara Sosa Pascual, reiteraron que son de conocimiento público por su disponibilidad en el portal de la CEE.
De esta forma, el testimonio del primer testigo, Lidy López González, se limitó a reiterar que existían errores de cálculos en las actas, la aparición de maletines días después de haberse finalizado precintos y maletines sin sello.
“Temprano en el proceso encontré en un error. En la sábana, en la parte de arriba de la derecha se resumen los votos por candidaturas, en la parte de abajo van los votos por cada candidato. La cantidad de Miguel Romero excedía por cientos de votos la cantidad de papeletas que habían”, aseguró López González, quien laboró en el proceso en control de actas, consolidación de actas en el Precinto 1 de San Juan y como funcionario de colegio el día de las elecciones.
En su introducción, se proyectó a López González como un conocedor de las matemáticas, a modo de sustentar sus declaraciones sobre descuadres numéricos. Su alegación de cerca de 800 de papeletas discordantes fue descartada del récord judicial porque era más especulativa que un estimado.
El testigo declaró que la desorganización era tal que no había forma de distinguir los materiales de voto adelantado por sus distintas modalidades y, pese a que se desconocía la procedencia de las papeletas, de todas formas se pasaban por la máquina de escrutinio. A esto, el licenciado Félix Passalacqua, en representación de la CEE, estableció que existían mecanismos para denunciar y subsanar estas incongruencias al momento de su hallazgo en el escrutinio.
No concordaban solicitudes
Tatiana Cintrón Santiago, por su parte, expresó bajo juramento que había un discordancia entre la cantidad de votos por adelantado y solicitantes para estas modalidades y documentos sin números de control ni ponches. Según Cintrón Santiago, quien trabajó en el área de la Junta Administrativa de Voto Ausente y Adelantado (JAVAA), empleada por el MVC, los protocolos de manejo para este material sensitivo era diferente entre JAVAA y las Juntas de Inscripción Permanente (JIPs).
“Nos dijeron que no íbamos a estar validando, solo buscar la solicitud y poner recibida. En mi mesa, nosotros decidimos que sí íbamos a estar validando, que la fecha este correcta. En muchos casos veíamos que no tenían solicitud. Trabajamos ocho bandejas por día, las bandejas tenían de 100 a 125 sobres, las teníamos que contar y por lo menos, por bandeja podíamos conseguir dos a tres casos que no tenían identificación, que no tenían remitente, casos que no tenían identificación, pero tenían remitente”, señaló Cintrón Santiago.
La testigo estimó que trabajó alrededor de 400 sobres de San Juan en voto adelantado cuyo manejo le produjo dudas.
Aunque en la demanda de Natal Albelo se habla de 20,418 votos de Unidad 77 que pueden resultar ilegales, durante los dos días de vista no se ha especificado un número, sino diferentes estimados.
Un tercer testigo, José Luis Lebrón, observador de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), hizo un dibujo en la pizarra de la sala para esbozar que la seguridad en las “bóvedas” de la CEE —jaulas en “cyclone fence” que almacenaban los maletines— era dudosa.
“Me preocupaba el asunto de las cámaras. Habían cámaras en diferentes puntos, pero haciendo preguntas sobre quién controlaba las cámaras, me decían que nadie controlaba las cámaras. Le pregunté a don Manuel, Julio, Rosa Vellón, al Presidente de la CEE. A él, al Presidente de la CEE, le pregunté en dos ocasiones. Me dijo que nadie tiene control de eso y había que solicitar que se enseñara el día, la hora. Le pregunto si la Comisión Estatal de Elecciones tiene el control y me dice que no tienen control de eso”, manifestó Lebrón.
El contra interrogatorio a Lebrón —liderado por el licenciado Francisco González Magaz, en representación del PNP— buscó desacreditar su credibilidad porque el observador de la ACLU había escrito mensajes en Facebook en oposición a la Palma y la Pava, incluso en fechas previas a comenzar sus labores voluntarias en el Coliseo Roberto Clemente, donde se llevaba a cabo el escrutinio. En ese aspecto, el juez Anthony Cuevas Ramos recordó que Lebrón estaba en todo su derecho de escribir esos mensajes porque formaban parte de su derecho constitucional a la libertad de expresión.
Contrario al primer día del juicio, la representación legal de Romero Lugo no hizo preguntas a los testigos, pero reiteró una petición previa de tachar los testimonios porque no representaban prueba clara, robusta y convincente para el caso. La adjudicación de la prueba está en manos del juez.
Las preguntas fueron cursadas por los abogados del PNP, la CEE y los Partidos Popular Democrático (PPD) e Independentista Puertorriqueño (PIP).
Regaño del juez
Por segundo día consecutivo, las objeciones constantes de la defensa fueron la orden del día, solo que esta vez el juez Cuevas Ramos urgió a las partes a no dilatar más el proceso.
“A mí me luce que ustedes, a través de las objeciones, quieren economizarse el tiempo del contra interrogatorio, porque pretenden mediante las objeciones y argumentaciones traer o aclarar aquello que pueda ser parte de la línea de preguntas. Las cosas no funcionan así”, exclamó Cuevas Ramos.
El juez hizo referencia a los abogados que representan al PNP y a la CEE, quienes levantaron objeciones a la línea de cuestionamiento de los abogados de Natal Albelo —incluso antes que estos terminaran de verbalizar sus preguntas— y las respuestas del testigo.
“Yo casi estoy por concluir que toda la animosidad de este litigio se debe al encierro de la pandemia, que no les ha permitido a los compañeros participar más del proceso judicial. No hay que objetar por cosas que no le hacen daños, no hay que pedirme tomar conocimiento, tranquilos”, solicitó Cuevas Ramos.
De acuerdo a los licenciados, las objeciones buscaban aclarar el récord que el tribunal elabora sobre el caso. No obstante, el juez señaló que las objeciones innecesarias atrasaban los procesos, ya que el primer testigo estuvo en la banca unas cuatro horas.
“Yo sé que el récord claro para usted es aquello que le convenga a su cliente. Eso es según del color del cristal con que se mira. Yo lo entiendo, eso es así, lo que pasa es que el récord va a quedar claro a medida que cada uno haga el contra interrogatorio y se ponga al testigo donde tiene que estar. No mediante objeciones. Una cosa es que la pregunta es muy amplia, que es ‘misleading’, eso es otra cosa”, explicó el juez.
Los trabajos se extendieron hasta después de las cinco de la tarde, una hora más de lo usual y que a su vez conlleva arreglos adicionales para los empleados del Tribunal de Primera Instancia de San Juan.
La próxima vista está pautada para el miércoles, 17 de marzo, a las 10 a.m.