Tras renuncia de Rosselló, mejoró la relación con el gobierno federal
La comunicación entre el gobierno estatal y el gobierno federal sobre la recuperación de Puerto Rico tras el huracán María ha mejorado desde aproximadamente seis o siete meses, según el contralmirante Peter J. Brown.
Ese período de tiempo ofrecido por el también designado como Coordinador de la Casa Blanca para la recuperación coincide con la salida de Ricardo Rosselló Nevares como gobernador y el eventual ascenso de Wanda Vázquez Garced, a quien Brown elogió por su actitud y experiencia.
Concuerda, además, con los requisitos impuestos a Puerto Rico por el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano federal para tener acceso a los más de $20,000 millones en fondos federales asignados tras el huracán, ocurrido el 20 de septiembre de 2017.
“La relación con la Gobernación ha cambiado a través de los pasados seis o siete meses. Eso ha jugado un rol dramático en el cambio. Su experiencia como Secretaria de Justicia, asegurándose que los fondos federales se utilicen de forma sabia es absolutamente vital para ayudar a la Casa Blanca”, exclamó Brown desde La Fortaleza.
De acuerdo al contralmirante de la Guardia Costera, este ambiente de cooperación y confianza será del agrado del presidente Donald J. Trump, quien quedará convencido que el dinero federal se ha utilizado de una forma sabia.
Tras el huracán María, el presidente Trump ha recalcado que el Gobierno de Puerto Rico es corrupto e incompetente en el uso de fondos federales. En una de sus tantas discrepancias difundidas a través de la prensa con Rosselló Nevares, lo tildó como un 'gobernador terrible'.
Como ejemplo, Brown aplaudió que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) y la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3) trabajen en el mismo edificio.
Desde diciembre de 2017, FEMA trasladó su centro de mando a oficinas propiedad del Grupo Ferré-Rangel, localizadas en Guaynabo frente a City View Plaza, debido a requerimientos de arrendamiento en el Centro de Convenciones. Al ser creada ese mes por el entonces gobernador Rosselló Nevares, COR3 también se mudó al espacio.
“Las estructuras que se han puesto en marcha permiten que las agencias trabajen juntas físicamente en el mismo edificio. Si COR3 tiene una petición o un requerimiento, se lo dan a FEMA directamente. No pasa por el correo. Es cara a cara, ojo con ojo”, subrayó Brown.
Por otro lado, FEMA separaba fondos para unos 10 a 15 proyectos al mes hace seis o siete meses atrás, según el encargado de la recuperación de desastres por parte de esa agencia, Alex Amparo. No obstante, en febrero, ese ritmo aumentó a un estimado de 160 proyectos porque las agencias lograron ponerse de acuerdo en lo que son las prioridades.
Durante su primera conferencia de prensa en Puerto Rico ayer, efectuada luego de una reunión con la Primera Ejecutiva y los jefes de agencias, Brown abordó de manera general lo que serían sus labores como Coordinador, sus prioridades en el cargo y lo que significa para él su designación por parte del presidente Trump.
Más allá de atribuirle la coordinación de los esfuerzos del Gobierno de los Estados Unidos para reconstruir la infraestructura de la Isla y abonar a su resiliencia el pasado 7 de febrero, la Casa Blanca no ha publicado una Orden Ejecutiva o un documento que establezca el alcance de las responsabilidades del contralmirante.
Sin embargo, Brown subrayó que sus labores consisten en servir de enlace entre ambos gobiernos y mejorar la percepción de los trabajos del gobierno federal.
“Mi trabajo consiste de esas dos cosas. Como enlace, una voz amiga en la Casa Blanca sobre lo que está pasando, trabajar con las distintas agencias federales, principalmente en Washington D.C., para asegurar que el nivel de coordinación local se replique en la capital federal. Sumado a eso, mi trabajo es mejorar percepciones, no solo dentro del gobierno, pero también entre el público referente a lo que está pasando en Puerto Rico. Me dijo ‘procura que se haga’. No lo estoy citando, pero es lo que dijo y lo que me asignó”, explicó Brown.
El contralmirante aseguró que su nuevo rol en Puerto Rico le es de suma importancia, ya que estuvo destacado en la Isla en el 1985 al principio de su carrera en la Guardia Costera. Igualmente, fue aquí donde conoció a su esposa, una mujer de ascendencia dominicana.
En lo que se considera una reducción de rango, su asignación como Coordinador para Puerto Rico vino después de haber sido nombrado Asesor de Seguridad Nacional en Casa Blanca.