El grupo de médicos asesores detalló el plan para minimizar los contagios durante la celebración del torneo.

El éxito de la reanudación del torneo del Baloncesto Superior Nacional (BSN) dependerá del estricto protocolo de seguridad que estableció el grupo médico asesor y también de la disciplina de jugadores, técnicos y todo el personal que laborará en el evento, para cumplir con las reglas establecidas para evitar los contagios de Covid-19 dentro de la burbuja.

Así lo aseguró anoche el presidente del BSN, Ricardo Dalmau y el grupo de los médicos que diseñó el plan para hacer posible el torneo, que reunirá a diez equipos por seis semanas en la burbuja del hotel Wyndham Grand Rio Mar, de Río Grande. Los partidos oficiales comenzarán el 10 de noviembre.

El torneo contará con una batería de médicos, epidemiólogos y psicólogos que estarán dentro de la burbuja y también con personal médico externo que apoyarán el trabajo que allí se realice.

Además, cada equipo contará con personal médico que desde ya está monitoreando el personal antes de entrar en la burbuja.

Según se explicó, la idea de que cada equipo haya celebrado acuartelamientos previos al inicio del torneo, conocidos como “preburbujas”, además del acondicionamiento físico de los jugadores, tiene la intención de minimizar la cantidad de personas de riesgo que puedan entrar en la burbuja, una vez arranque el torneo.

“El concepto principal es la preburbuja. Muchos equipos ya han hecho cinco o seis pruebas previas”, comentó el Dr. Miguel Magraner, director de medicina interna de la Escuela de Medicina de Ponce, quien forma parte del grupo asesor de médicos.

Magraner detalló que antes de hacer su entrada a la burbuja, cada jugador deberá presentar una prueba negativa a Covid-19 y también haberse vacunado contra la influenza. Luego, deberá permanecer tres días aislado en su habitación para entonces someterse a un segundo examen, antes de recibir el visto bueno para integrarse al equipo.

De igual modo, los lunes serán días de pruebas para jugadores, técnicos, personal de televisión y todo el que trabaje dentro e la burbuja.

ESTRICTAS MEDIDAS EN CASO DE UN POSITIVO

En caso de que un jugador arroje positivo a Covid-19 pero no presente síntomas, de inmediato se paralizarán las labores, el jugador será aislado en unos cuartos del hotel que serán designados a esos fines y comenzará un proceso de rastreo interno. Una vez se determinen el o las personas que pudieron haber sido contagiadas, se determinará cómo y cuándo se reanudará el torneo.

“Nosotros tenemos que paralizar funciones si se detecta un positivo. Por eso es el propósito de la preburbuja, que llegue la menor cantidad de personas expuesta a la burbuja”, sostuvo, por su parte, el epidemiólogo José López de Victoria.

En cambio, si un jugador presenta síntomas, de inmediato será enviado al hospital y de igual forma, se activará el protocolo de rastreo interno.

Magraner, sin embargo, recordó que el 70% de las personas que contraen el virus son asintomáticos.

Por otro lado, el Dr. Luis Molinari, quien es cardiólogo, pero también ha laborado por años en el baloncesto, tanto con los equipos de Santurce y Bayamón, entre otros, así como con la selección nacional, explicó cuál es el protocolo en caso de que un jugador deba ausentarse de la burbuja por motivos médicos que no estén relacionados con el coronavirus.

“Cualquier jugador que tenga que salir para tomarse una placa o un MRI, tiene que salir con una mascarilla N95, ‘face shield’ y equipo de protección de cuerpo completo. Tiene que ir en ambulancia y cuando llega a la institución va directo al área de radiografía y nuevamente regresar a la burbuja. No puede tener contacto con nadie”, explicó.

Mientras, el presidente del BSN fue enfático en que, si un jugador viola las reglas y se sale deliberadamente de la burbuja, recibirá “sanciones severas”, aunque no quiso especificar si incluirá expulsión inmediata.

“El proceso disciplinario está bien establecido y, dependiendo la magnitud de la causa como el efecto, tiene consecuencias y son severas todas”, insistió Dalmau, quien recordó que solo se necesita que una persona no siga las reglas para echar a perder todo el esfuerzo que se haya realizado.

DENUNCIA DE CARLOS EMORY

La conferencia de prensa virtual del personal médico que dirigirá el protocolo salubrista en el torneo del BSN se realizó en momentos en que se dio a conocer que, al menos, tres jugadores de distintos equipos en el BSN arrojaron positivo y que el jugador, Carlos Emory, denunció que fue despedido por los Mets de Guaynabo por supuestamente haber dado positivo a Covid-19.

Dalmau indicó que, en el caso de Emory, esperará a que el director de torneo haga su investigación del caso antes de emitir algún comentario.

El equipo medico contará, además con la ayuda y asesoría del Dr. William Félix Rodríguez, quien ha laborado por años como asesor médico en distintos eventos de la NBA y también de USA Basketball en competencias internacionales.

Félix Ramírez indicó que, aunque no pretenden alcanzar el mismo modelo de burbuja que estableció este año la NBA, sí podría servir de ejemplo para que otras organizaciones aficionadas o profesionales establezcan eventos similares.

“No es un modelo exacto (al de NBA) porque sería casi imposible por las limitaciones económicas, pero estoy seguro que va a ser un modelo eficaz siempre y cuando todas las partes engranen”, destacó el galeno.

“La clave esta en las preburbujas y en que todos nos acatemos a las reglas. Eso es todos. Si hacemos eso, no es que podamos garantizar que no habrá un caso, pero diría que las posibilidades de contagio son extremadamente mínimas”, sentenció.

ENCAMINADA LA PARTE ADMINISTRATIVA

Por otro lado, a parte del proceso médico, Dalmau aseguró que se ultiman detalles para que el torneo se celebre sin mayores novedades, incluyendo el aspecto económico.

Previamente, Dalmau había manifestado que el costo para celebrar el torneo podría elevarse a unos $4 millones.

“Estamos en ese proceso. Son varios millones, pero te diría que vamos a un ritmo estable”, destacó Dalmau, quien aprovechó para aclarar que el gobierno no le ha dado al BSN $1.6 millones en efectivo para operar el torneo, sino que otorga un incentivo contributivo.

El BSN arranca el 10 de noviembre con los partidos entre los Capitanes de Arecibo frente a los Atléticos de San Germán y los Vaqueros de Bayamón ante los Brujos de Guayama. Luego de que cada equipo haya jugado nueve partidos en la fase regular, se pasará a una postemporada también reducida. Los cuartos de finales serán a un máximo de tres juegos y las semifinales y final a un máximo de cinco.