Comienza la carga de combustible del cohete SLS para el lanzamiento de Artemis I
La ventana de dos horas para el intento de lanzamiento de la misión se abre a las 1:04 a.m. hora local del miércoles.
Las operaciones de carga de combustible en el potente cohete Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) de la misión lunar Artemis I comenzaron este martes en el Centro espacial John F. Kennedy, de Cabo Cañaveral, en Florida, horas antes del despegue previsto para la madrugada del miércoles.
La ventana de dos horas para el quinto intento de lanzamiento de la misión se abre a las 1:04 a.m. hora local del miércoles.
Artemis I es una misión no tripulada que supone la primera del programa Artemis, cuyo objetivo es establecer presencia humana en la Luna como un paso previo para llegar a Marte.
La NASA informó que ya comenzó la tarea de "cargar los propulsores" del SLS, que llevará al espacio a la nave Orión.
El almacenamiento en los tanques de combustible comienza con el enfriamiento de las líneas de transferencia de oxígeno líquido e hidrógeno líquido de la etapa central del cohete, según detalla la agencia espacial estadounidense en el blog de la misión.
Mientras tanto, el canal oficial de YouTube de la NASA comenzó esta tarde a transmitir imágenes del proceso de "tanqueo", así como vistas del cohete de 98 metros de altura situado en la rampa de lanzamiento de Cabo Cañaveral, y también del centro de control de lanzamiento.
Tal y como habían vaticinado los meteorólogos, las condiciones atmosféricas parecen favorables para facilitar la madrugada de este miércoles el primer lanzamiento del programa Artemis 1 que pretende conquistar la Luna medio siglo después de dejar de visitarla.
La última misión de la NASA en la que sus astronautas pisaron la Luna se remonta a Apolo 17, que se llevó a cabo entre el 7 y el 19 de diciembre de 1972.
La NASA quiere poner a prueba en este viaje 50 años después las capacidades del sistema de lanzamiento espacial (SLS) y de la nave Orión, que orbitará la Luna, antes de un viaje tripulado.
Artemis I lleva también al espacio 10 pequeños satélites CubSat que de manera autónoma realizarán diversas investigaciones científicas.
La atención es máxima para la madrugada del miércoles, dado que la NASA ha tenido que retrasar cuatro veces la partida de la misión, dos por causas meteorológicas, pero también en otras dos ocasiones por motivos técnicos.