Si la Junta le mete mano a los pensionados que sea con el 'embudo' (documentos)
Con sus finanzas malhechas desde el día uno, con constantes reformas sin pie ni cabeza y hasta por el abandono de algunos gobiernos, los pensionados del país pasan por una odisea que tampoco promete aclararse del todo con la llegada de una Junta de Control Fiscal (JCF) federal.
Con un déficit actuarial que sobrepasa los $33,000 millones combinados entre los sistemas de retiro del Estado Libre Asociado (ELA), el de Maestros y el de la Judicatura, se estima que la insolvencia del sistema dejará al menos una generación de pensionados viviendo bajo los niveles de pobreza. De acuerdo a los recién publicados estados financieros auditados para 2014, el Fondo General tendría que comenzar a pasar dinero al Sistema de Retiro de Empleados en 2017, al de la Judicatura en 2019 y al de los Maestros en 2020.
'Me preocupa de la Junta que vayan a meter la mano con los pensionados porque aquí más del 50% de la clase pensionada del País tiene una pensión menor de $700 al mes. Si van a hacerlo, que lo hagan con el embudo, que cojan a los que tienen pensionesaltísimasprimero y que hagan ajustes arriba y que eviten tocar a los que tienen menos de $1,000 porque a esas personas no les da el dinero para vivir. Lo único que les queda por quitarles sería el bono de Navidad y un bono de medicina en julio, que entre las dos suman $300, después de ahí no queda más nada que ajustar pensiones', aseguró Ángel Febus Marrero, exdirector de la Comisión Especial Permanente sobre los Sistemas de Retiro (CEPSR).
Según el texto de la Ley conocida como 'PROMESA', la Junta podrá determinar que un sistema de pensiones está 'materialmente desfinanciado' y, al así hacerlo, puede ordenar un análisis por un actuario independiente que incluya una estrategia de cómo se financiarán los siguientes 30 años de pagos. Se tendría que identificar la fuente de esos pagos y se podría evaluar 'los beneficios existentes y su sutentabilidad'. A su vez, la JCF podrá recomendar al gobierno sobre 'el establecimiento de alternativas para cumplir con obligaciones para pagar las pensiones de los empleados del gobierno territorial'.
'Todo esto es producto de malas decisiones de los políticos. Se seguían aprobando beneficios. En leyes especiales solamente, que son beneficios que se aprobaron para los pensionados y beneficiarios del sistema, para el 2013 el Gobierno pagaba $257 millones. Esto es una situación que se ha venido acumulando con el pasar del tiempo. Decían que venía el lobo y el lobo llegó y lamentablemente lo que pasa con los sistemas de retiro al día de hoy es que el Gobierno es el que tiene que financiarlo, tiene que inyectarle fondos', expuso.
Los tribunales también han incidido en los problemas de los sistemas de Retiro. Con el Tribunal Supremo recientemente, por ejemplo, emitiendo una decisión cpn la que prácticamente preservaron intacto su sistema de retiro ante la reforma que legisló la Administración García Padilla.
Según relató Febus Marrero, para la década de 1980 el déficit actuarial en los sistemas de retiro comenzó a agravarse y ya para 1999 el déficit ascendía a $3,500 millones. Luego de las reformas estructurales comenzaron a aumentar las aportaciones patronales e individuales mientras se continuó sufragando el beneficio a pensionados que aún disfrutaban de una pensión equivalente al 75% de sus salarios.
'Cuando se comienza a ejercer presión y viene la Legislatura y aprueba unos cambios estructurales para el Sistema de Retiro –que es cuando aumentan la edad de retiro hasta los 65 años de edad- ahí aumentan las aportaciones patronales e individuales y hacen otros cambios en la estructura. Pero eso lo hacen efectivo desde abril de 1990 en adelante. El problema estaba atrás, seguían ahí esos que tenían los beneficios de antes, la pensión de 75% de su salario, eso no se tocó. A pesar de que se aprueba el cambio, el déficit siguió creciendo al extremo que para finales de 1990 ya iba por $6,000 millones. En diez años, de $3,579 millones aumentaron a $6,450', detalló.
Febus Marrero opinó en que la falta de un estudio actuarial para medir el impacto de la reforma de 2013, agravó la situación al convertir los sistemas en un plan de aportaciones definidas por lo que ahora ningún pensionado tiene conocimiento de cuánto dinero se apresta a recibir una vez se jubile. Con esa reforma se estimó una aportación adicional del Gobierno a los Sistema de Retiro que no se ha podido cumplir hasta el momento.
De igual modo, el experto aseguró que el problema con los sistemas de retiro data desde la propia inserción de estos en Puerto Rico, pero reconoció que se empeoraron con el pasar de los años y las malas prácticas de los administradores de turno.
'Eso es un déficit que se ha venido acumulando con el pasar del tiempo y las malas prácticas de los gobiernos. Cuando el Sistema de Retiro se creó el 15 de mayo de 1951, lo que se hizo fue coger los sistemas de retiros que había desde la década de 1930 y los agruparon y crearon este. Cuando hacen eso, desde el día uno comienza un déficit actuarial a funcionar en el Sistema de Retiro. Desde el día uno se hizo mal', aseguró quien dirigió laCEPSRpor 15 años.
'Los actuarios de ese entonces le advirtieron al Gobierno que si eso seguía así, cuando acabara el Siglo 20 el sistema se iba a quedar sin dinero para cumplir con sus obligaciones. Dicho y hecho. Eso es precisamente lo que está sucediendo ahora. Pero el problema no fue solo que se comenzó con un déficit, sino que a medida que pasaba el tiempo se le fueron añadiendo beneficios a los participantes de los sistemas de retiro sin proveerle a este los fondos necesarios para cubrir esos gastos', añadió.
Sobre la propuesta del candidato a la gobernación por el Partido Popular Democrático (PPD), DavidBernier, de inyectarle $1,103 millones en fondos recurrentes a los sistemas de retiro de maestros y delELA, el experto señaló que esa cantidad se queda corta ante la necesidad real que tiene el Sistema de Retiro de empleados públicos.
'Cualquier inyección de fondos es buena para el sistema. Sin embargo, lo que se estima recoger para inyectar al sistema, en mi opinión, se queda corto con la necesidad de flujo de efectivo que tiene actualmente, el cualfluctúaaproximadamente por los $1,000 millones anuales. También hay que ver qué va a suceder con la Junta de Control Fiscal (JCF), porque entiendo que esa legislación necesitará pasar por el cedazo ellos', dijo.
Informe Sistema de Retiro 2010_19877
Informe Sistema de Retiro 2013_19878