Stiglitz, la UPR, el CNE y Puerto Rico
Me entusiasma que Puerto Rico ha sido destino recientemente de prominentes y diversas figuras intelectuales y grupos de vanguardia. Poco a poco se va notando que estamos pensando diferente.
El más reciente invitado fue el ganador del Premio Nobel en Economía en 2001, Joseph E. Stiglitz, quien se dirigió a un teatro lleno de la Universidad de Puerto Rico (UPR) -sobre 1,500 personas- y luego se dirigió a un nutrido grupo de la clase financiera de Puerto Rico en la conferencia anual del Centro para una Nueva Economía (CNE).
En la UPR, el Dr. Stiglitz se enfocó en el tema del costo de la inequidad, donde propuso que aún si no apoyas reducir la inequidad por razones humanistas debes apoyarla por razones económicas. Ejemplificó el problema con dos estadísticas impactantes:
-el 80% más bajo de la población gasta 110% de su ingreso y
-la familia Walton (Walmart) ha acumulado más riqueza que el 30% más bajo de la población
El Dr. Stiglitz considera que es inminente una amplia reformulación del diseño estructural del gobierno insular, nacional y las organizaciones globales. Indicó que operamos bajo un sistema financiero y económico disfuncional. Sin embargo, también comentó sobre ejemplos de éxito, como en Brasil, donde los datos muestran que las políticas del gobierno han sido efectivas en reducir la inequidad y el país ha prosperado. Esta observación se repite en otros países que han optado por políticas activas. En resumen, las políticas principales que Stiglitz recomienda son:
-perseguir empleo total
-enfocarse en la educación
-diseñar políticas industriales
El Dr. Stiglitz detalló que la inequidad no sólo se refiere al diferencial económico sino que más importante aún, se refiere a la inequidad de oportunidades. Explicó que desde hace bastante tiempo el sueño americano es un mito; los que logran movilidad social significativa son la excepción, no la regla. Hoy en día, las oportunidades para los jóvenes no se presentan igual para todos sino que se dan en función de la educación y el nivel económico de la familia. Además, nos alertó que la política electoral dominante es más cercana a un-dólar-un-voto que a una-persona-un voto y la economía en general se ha inclinado hacia 'buscadores de ingresos' en contraposición con 'generadores de riquezas'.
El Dr. Stiglitz recomendó usar la medida del GNP ('Gross National Product') en vez del GDP ('Gross Domestic Product') e invertir en infraestructura de calidad. Comentando sobre Puerto Rico, apoyó que se flexibilicen las leyes federales que ponen en desventaja a la isla, como las leyes de cabotaje, y recomendó la búsqueda de medidas que sirvan de contrapeso ('offset') a las que tienen dicho impacto negativo. Elaboró también dos posibles estrategias de contrapeso: que se asegure el flujo de capital a pequeñas y medianas empresas y que se activen políticas dirigidas a incrementar la productividad y la formación de empresas.
Con una gran sonrisa, se despidió de la UPR citando al ex Jefe de Gabinete del Presidente Obama y actual alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, diciendo: 'Nunca se debe desperdiciar una gran crisis' ('You never let a serious crisis go to waste').
CNEUnas horas más tarde, en la conferencia del CNE, el Dr. Stiglitz comenzó su segunda presentación abordando el tema del conocimiento y de la necesidad de desarrollar la capacidad de aprender. Distinguió la producción de conocimiento como un bien público distinto a la producción de cosas que acarrean mayormente un beneficio individual. Apuntó a que existe una gran brecha entre los que tienen más conocimientos y los que tienen menos. Aclaró que las políticas industriales se refieren a políticas dirigidas a cambiar la estructura de la economía y no sólo a asuntos de manufactura. Además, apoyó la idea de que en economías pequeñas, como la de Puerto Rico, se debe seleccionar en cuanto al alcance del desarrollo industrial algunas áreas o sectores específicos, tratar de abarcar demasiado es contraproducente, y que en éstas que se seleccionen se desarrollen capacidades o competencias ('competencies') de primer orden.
Luego de la presentación de Stiglitz, Sergio Marxuach del CNE explicó la delicada situación en la que nos encontramos hoy en Puerto Rico, fundamentándose en los eventos históricos que nos han traído hasta aquí. Marxuach además hizo énfasis en el tema del conocimiento al recalcar que tenemos que 'aprender a aprender.'
CNEEn el panel de cierre, Mike Soto presentó el nuevo proyecto del CNE apoyado económicamente por Open Society Foundations (fundado por Georges Soros) y puesto en marcha en Puerto Rico por la Clínica de Asistencia Legal de la Escuela de Derecho de la UPR, el American Civil Liberties Union y el Centro para el Periodismo Investigativo. En esta ocasión el CNE se ha propuesto como actor / hacedor saliendo así de su zona de confort de pensador ('think tank'). Esta es una importante prueba para el grupo, les auguro éxito!
El panel que estuvo formado por representantes de las organizaciones que se han unido al CNE articuló un mensaje de colaboración entre la economía abierta capitalista y el importante rol social del gobierno como agente activo. También enfatizaron en la necesidad de máxima transparencia de todos los procesos públicos. El panel concluyó que la transparencia gubernamental asume un rol estratégico para el bienestar de los ciudadanos como aliado de la libertad civil. Se dijo mucho más y esperamos por el vídeo para recordar otros importantes detalles.
A raíz de presenciar estas dos actividades, una vez más confirmé que las ideologías económicas son inservibles y que especialmente en esta época de grandes avances informáticos y tecnológicos, el asunto económico debe ser validado por evidencia científica. Además, cada vez más la tecnología al servicio del ciudadano se convierte en un ecualizador natural. También quedó claro (otra vez) que existe un problema sistémico de diseño que imposibilita o dificulta la ejecución efectiva sobre las exigencias y necesidades de hoy. Este problema sistémico tiene, a su vez, el efecto directo de aumentar la inequidad afectando particularmente a los que no pueden pagar por servicios privados para lograr lo que en teoría se supone sea un servicio público.
Los retos que enfrentamos son muchos y muy complejos y el camino será lento, largo y pesado, sin embargo, no puedo concluir sin mencionar que durante todo el día noté mucho interés y apertura, tanto en el Teatro de la UPR y como en el hotel donde se celebró la actividad del CNE, creo que poco a poco nos estamos dando la oportunidad a pensar diferente, a pensar mejor y sostenidamente.
Ahora queda por verse si en esta ocasión seremos capaces de poner la acción donde estamos poniendo el pensamiento y a la vez lograr que en este proceso aprendamos a aprender o dicho directamente nos convenzamos que actuar pensando es que se aprende.
Seguimos.
*El autor es CEO de Microjuris.com Inc. Tomado de Microjuris.com.