La muchedumbre que había aguantado por más de tres horas en el Estadio Hiram Bithorn, pero por meses en el mundo real, estalló en una sola voz el sábado para corear las canciones de Calle 13 en un concierto que su cantante, Rene Perez (Residente) comenzó con un llamado a la movilización social y con una lista de exigencias al Gobierno.

'Es momento de manifestarse', expresó Pérez en una conferencia de prensa minutos antes de que comenzara la función, que da fin a su gira mundial. 'En la que se manifiesten en unidad, habrá un cambio', exhortó antes de salir a comandar un público que, en términos numéricos, puede hacer la diferencia en cualquier elección general de Puerto Rico.

Su hermano, Eduardo Cabra (Visitante), comentó que esta gira los ha hecho conectar más con la gente. 'Me llevo una gira de gente respondiendo a la propuesta', mencionó.

Tan pronto los músicos subieron a tarima, a eso de las diez de la noche, el Bithorn se convirtió en una 'Fiesta de los Locos' y un 'Baile de los pobres'.

Residente, con una camiseta que leía 'La crudita está mal cocida', sacó un papel y dijo: 'vengo a exigir al Gobierno unas cuantas cosas... Devolver el dinero que le quitaron del bono de Navidad a los empleados... Que más que cerrar escuelas, hay que abrirlas por las tardes para dar clases de arte, música... Que hay que devolver lo que le quitó la Ley 66 a los empleados de las corporaciones públicas y respetar el derecho a la negociación colectiva... Que hay que hacer una asamblea de pueblo y exigir la excarcelación de Oscar López'.

El gesto fue respondido con un ensordecedor abucheo cuando mencionó la 'crudita' y con una ola de aplausos ante cada exigencia leída.

Al final de la lista, Pérez levantó su vaso plástico y brindó junto al pueblo, para entonar 'El Aguante' y proseguir con una presentación que incluyó una intervención especial del cantante Draco.

El único invitado de la noche fueDraco Rosa,quiencantó el corode 'La Vuelta al mundo',junto a Ileana Cabra (PG-13). La invitación a que la gente se tomara de la mano y viajara el mundo, es ya un llamado literal y reiterado de Calle 13, cuya propuesta ha madurado en el contacto con otras culturas.

'No estamos solos. Todos los países tienen situaciones fuertes, difíciles y de desempleo. Si van a Madrid lo van a ver... En México desaparecieron estudiantes... El mundo está al revés y nosotros tenemos que ver, como boricuas, cómo nos unimos sin pensar en los colores', enfatizó, quien se notaba ansioso por comenzar la función, en donde se encontraban amigos de la infancia y familiares.

Las sutilezas románticasfueron intercaladascon bombazos de críticas como 'Multi viral', 'Tango del Pecado' y 'Perseguido', en una constante subida y bajada de intensidades, que mantuvo al público a la expectativa.

Antes de reentrar en el terreno sensible de'Ojos color sol', el cantante dedicó la canción a su hijo, Milo, quien aseguró que leha cambiado la vida.

PG-13 tomó la parte de Silvio Rodríguez, así como la parte de Susana Baca y Totó la momposinaen 'Latinoamérica', una de sus mejores interpretaciones de la noche, cuando finalizó con un grito: 'qué viva Latinoamérica y Puerto Rico libre'. Fue entonces que desde los balcones privados se desplegóuna monoestrellada gigantesca, con el triángulo azul celeste.

El grupo se retiró, no sin que el público vociferara por otra, mientras se ondeaban varias banderas en la arena. Entre los más cercanos a la tarima, se escuchó un cántico paciente que decía 'qué bonita bandera'.

Como si se tratara de una asamblea de pueblo, Calle 13 regresó para cumplir con el reclamo popular, con su primer éxito, Atrévete. 'Vámonos pal' 2005', dijo Pérez.

Luego cedió los micrófonos a Clarissa López, la hija del preso político OscarLópez Rivera, quien demandó: 'Es hora de traer a mi papá a casa', ante miles que coreaban 'libertad, libertad'.

Consciente de que sus expresiones han puesto a un amplio sector en su contra, cuando insultó al ex gobernador Luis Fortuño en plenos premiosMTV Latinoamérica, Pérezdestacó que no es cuestión de colores: 'No importan los partidos políticos. En mi familia hay de todos los colores... Ojalá Puerto Rico se pueda manifestar en unidad'.

En su intercambio con la prensa, había sido aún más específico:'Yo sé que separé a un sector, que me pudo haber escuchado en temas como Latinoamérica. Yo hice mal en ofender al ex Gobernador con lo que le dije en ese momento... Es parte de lo que tengo que aprender: dejar mis ideales un poco, para ver como los hermanos puertorriqueños nos llevamos mejor y vemos cómo PR mejora'.

Entonces, tan pronto como hizo la paz, punzó con la lengua al lanzar su diatriba contra los federales mediante la lírica 'Querido FBI'. 'En el nombre de Filiberto Ojeda Ríos...'. Y así, luego de revolucionar el Bithorn, dio a todos la bendición final con la exhortación: 'Vamos a portarnos mal'.