El alcalde de Ponce, Luis Irizarry Pabón, había removido propaganda de líder PNP en la ciudad, Pablo Colón Santiago.

El Tribunal de Apelaciones abrió la puerta para que prosiga una demanda por $1 millón que sometió el presidente del Partido Nuevo Progresista (PNP) en Ponce, Pablo Colón Santiago, contra el municipio de Ponce y su alcalde, Luis Irizarry Pabón, porque estos le removieron propaganda política ilegalmente.

La sentencia del 29 de marzo pasado sostiene una determinación del Tribunal de Primera Instancia en la controversia que comenzó el 14 de septiembre pasado mediante demanda de Colón Santiago y el Comité Municipal del PNP, rivales políticos de Irizarry Pabón, electo por el Partido Popular Democrático.

Colón Santiago ya había obtenido en el foro de Primera Instancia un interdicto que le prohibió al municipio remover su propaganda política hasta que ocurriera la elección por la presidencia del comité municipal, lo que se registró el 13 de noviembre pasado. Pero ahora el apelativo mantiene la posibilidad de que el político obtenga una compensación económica del municipio por la propaganda que “removió, arrancó, dañó y destruyó... en dos fechas distintas”.

En una vista reciente del caso ante el juez Jesús E. Soto Amadeo, los abogados del municipio adelantaron que recurrirían al Tribunal Supremo por entender que no procede que se otorgue compensación económica por la aplicación correcta de una ordenanza municipal que se presume constitucional y que prohíbe “la colocación de material gráfico, en propiedad pública, incluyendo los postes”.

El político PNP, quien también es un abogado criminalista veterano, reclama compensación de $1 millón porque los actos del municipio representaron “una interferencia y un ataque directo a su derecho a adelantar su candidatura a la presidencia del Comité Municipal del PNP, a su libertad de expresión política, al derecho de sufragio de sus simpatizantes y al derecho constitucional a la libre asociación”.

“[D]eterminamos que el Lcdo. Colón Santiago tiene una reclamación válida que amerita la continuación de los procedimientos”, concluyó el panel de jueces apelativos compuesto por Felipe Rivera Colón, Eric Ronda del Toro y Waleska Aldebol Mora.

Colón Santiago cobró notoriedad reciente, también, porque pidió, y consiguió, que su amigo, el juez asociado del Tribunal Supremo, Erick Kolthoff Caraballo, juramentara a su hija como abogada, personalmente y en su despacho del Supremo, de manera preferencial y separada al resto de las personas que serían juramentadas tras aprobar el examen de admisión.

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Juez Supremo defiende juramentación privada de hija de abogado amigo