Para el republicano puertorriqueño José "Quiquito" Meléndez en su baja en las encuestas ha sido clave el caso Disney, las medidas antipáticas contra los inmigrantes y la sombra de Donald Trump.

Aún la candidatura del republicano Ron DeSantis no se lanza formalmente y, al menos las encuestas, no están dándole el apoyo que necesita el político para fortalecer sus aspiraciones a la Casa Blanca y salir de la sombra del expresidente Donald Trump.

DeSantis, a quien muchos critican por ser una copia mala de Trump, fue respaldado por el exmandatario en 2018 para acceder a la gobernación de Florida, donde fue reelegido en 2022 y cuya población como la del resto de Estados Unidos parece haberle dado, por el momento, la espalda.

El político estadounidense, quien anunciaría su candidatura el próximo 25 de mayo (en una actividad con donantes de su campaña), está abajo en las encuestas según lo refleja un sondeo de Redfield and Wilton Strategies.

En primera instancia, una eventual disputa entre DeSantis y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, la ganaría el actual primer ejecutivo estadounidense por 14 puntos porcentuales (47% contra 33%), mientras que si el rival fuera Trump la diferencia disminuiría a apenas un punto porcentual.

Incluso, si DeSantis se impusiera en las primarias del Partido Republicano (los otros aspirantes son Mike Pence, la exgobernadora y exembajadora ante la ONU Nikki Haley, el empresario Vivek Ramaswamy y el senador Tim Scott), la encuesta establece que solo el 62% de los simpatizantes de Trump votarían por el gobernador en unas elecciones contra Biden (y el 14% incluso apoyaría al presidente demócrata).

Para el republicano puertorriqueño José "Quiquito" Meléndez, "hay diferentes asuntos" que forman este escenario, pero resaltó que "el local, en la Florida, es bastante complejo. Me explico, hace unos días nos enteramos que como consecuencia de la pugna que tiene el gobernador DeSantis con la compañía Disney (por una ley que prohíbe hablar de identidad de género y de orientación sexual en las escuelas), le costó al Estado cerca de un billón de dólares en inversión en el área de Lake Nona (Orlando)".

"Hay una cantidad inclusive de conservadores republicanos que respaldaban a brazo partido la candidatura de DeSantis y no solamente eso, sino que votaron por él y fue un ejemplo de la fuerza electoral de DeSantis, que todo el mundo pensaba que de ahí en adelante estaba encaminado hacia la presidencia, pero la realidad del caso es que no ha sido así y la pregunta es por qué", expuso.

Meléndez opinó que "han ocurrido una serie de malas decisiones administrativas y principalmente la pugna con Disney ha sido devastadora (la empresa de entretenimiento descartó una inversión de $1,000 millones de dólares, 2,000 empleos con $120,000 dólares de salario promedio en Orlando) y ese conflicto se propaga a través de todos los Estados Unidos, porque todo el mundo está pendiente".

Destacó que a Disney "todo el mundo va, republicanos, demócratas, liberales, conservadores, es transversal. Y eso ha tenido un efecto, y lo digo porque he podido hablar con diferentes personas que viven en la Florida y habían hecho inversiones en el área de Lake Nona y que ahora tienen un problema y se molestaron porque su inversión se va a ver afectada porque la empresa la descartó tras haberla anunciado. Incluso se había decidido la mudanza de mucho personal de Disney de California a Lake Nona, que ahora va a tener que regresar. Esto es importante con las otras luchas, distintos asuntos, como el de la migración".

El también representante, quien ha sido delegado del Partido Republicano de Puerto Rico, coordinador electoral regional, director regional de la Young Republicans Federation y National Committeeman de los Young Republicans, opinó que hay unas "medidas drásticas" que se han tomado en la Florida "buscando superar de alguna manera las que se dieron bajo la administración de Trump, pues ciertamente le han estado rebotando en las encuestas".

Detalló que una de los principales elementos que tiene la Florida es que, aunque tiene una gran población de migrantes, muchos de ellos no poseen un estatus legal "y los constructores tienen que cumplir con la última legislación (de DeSantis) de que tienen que identificar que sus trabajadores tienen un estatus legal, pues no encuentran trabajadores y los han tenido que desplazar. Eso está creando un problema de disponibilidad de mano de obra en la Florida, que no existía hace apenas una semana y que se está proyectando a nivel nacional".

Junto con aclarar que aún no hay una "campaña formal" de DeSantis a la presidencia, Meléndez aseguró que el gobernador está tomando en cuenta a la población latina que reside en el estado: afirmó que el político cuenta con representantes hispanos en su equipo y recordó, por ejemplo, que en el Congreso, como legislador, fue coauspiciador del proyecto de estatus de Puerto Rico sometido en el Congreso por la comisionada residente Jenniffer González Colón.

Comentó que el gobernador "está siendo influenciado por una serie de asesores que están buscando que él suplante, en el escenario nacional, la figura del expresidente Trump, que está en problemas legales. Pero ciertamente el problema que tiene DeSantis es que no ha podido de alguna manera desarrollar políticas locales en la Florida que pueda exportar exitosamente, como lo había hecho previo a su reelección como gobernador".

Sobre el hecho de que parte de los simpatizantes de Trump no votarían por DeSantis, consideró que "es interesante ese detalle, pero no me sorprende porque gran parte de los votantes de Trump son de él exclusivamente, son gente que no participaba de los eventos electorales y que ahora lo está haciendo porque tiene un compromiso personalísimo con Trump. Y esas personas que típicamente no están participando crean un problema porque radicalizan en cierto grado el Partido Republicano".

Manifestó que, "básicamente, el Partido Republicano nacional se ha convertido en un partido de Trump y eso hay que mirarlo con cuidado, porque si se mantiene en esa dirección eso polariza la política nacional y reduce las posibilidades de que el partido pueda prevalecer. Se pensaba que la candidatura de DeSantis iba a suplantar la de Trump si mantenía unas políticas que pudieran ser atractivas para ambos bandos".

Sin embargo, dijo que "con lo que ha hecho en las últimas semanas, coger a los migrantes, llevárselos en guaguas a otras ciudades y dejarlos tirados, eso ha tenido un impacto en cómo la gente lo ve. Hay que reconocerlo, demuestra un alto grado de insensibilidad".

Respecto de las críticas de que DeSantis sería una mala copia de Trump, consideró que el expresidente "tuvo muchos aciertos en términos económicos. Eso le ganó a Trump muchos agradecimientos de todos los sectores. No obstante, Trump liquidó su propio éxito con su drama. A la gente no le gusta el drama de Trump, que él es bravo, que insulta, se burla, y la gente se cansó de eso y le costó. En el caso de DeSantis, la campaña se pensaba que iba a ser una copia en términos económicos de las políticas de Trump, pero sin el drama. Y eso la gente pensaba que iba a provocar un impacto positivo, pero con estos desaciertos no ha podido lograr despegar".

En cuanto al hecho de que haya varias candidaturas en el Partido Republicano interesadas en la Casa Blanca, el político boricua señaló que "lo que pasa es que hay un vacío" para llenar un espacio de bonanza económica dejado por Trump, pero sin el "drama" (de sus casos legales, por ejemplo), tras lo cual resaltó las aspiraciones de Scott, "un negro que quiere proyectar lo que debería ser la nueva cara del Partido Republicano, y de Haley, que es mujer, de ascendencia india y que domina el escenario internacional".

"Yo he hablado con todos y todos reconocen a los puertorriqueños como una parte importante de los Estados Unidos; que hay que buscar la forma de no solamente resolver el asunto del estatus, sino también el tema económico y ayudar a la recuperación de Puerto Rico, particularmente cuando hay que mirar esto con mucha sensibilidad. No es que el gobierno federal quiere meter dinero porque sí; hay un problema económico y de unos desastres naturales que ocurrieron y Puerto Rico todavía está en eso. Ellos están pendientes, hay una conciencia", acotó.

En la trinchera del frente, la demócrata, el también puertorriqueño Kenneth McClintok tiene su opinión de lo que sucede "desde la orilla del camino" en la candidatura de DeSantis.

"Aparentemente, él (De Santis) ha tenido problemas en sostener el apoyo que originalmente había tenido contra el expresidente Trump. Da la impresión como que se le está haciendo tarde", declaró el político.

Agregó que el hecho de que hayan tantos aspirantes en el Partido Republicano para aspirar a la Casa Blanca "aumenta las posibilidades de que el presidente Trump se quede con la candidatura, porque como en las primarias, en el Partido Republicano particularmente, si los partidarios de Trump son más que la suma de todos los partidarios de los otros candidatos, pues él gana con claridad".

Sobre las encuestas, consideró que las diferencias entre Trump y DeSantis en una posible disputa con Biden "va a variar a través del tiempo, porque estamos muy temprano para la elección y van a pasar muchas cosas de aquí a allá".

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