Marchemos y MAS: del plebiscito a Washington en contra de estadidad
'La política no aguanta espacios vacíos'. Por diferentes razones, organizaciones que representan la independencia y la libre asociación defendieron su participación este domingo en el plebiscito de estatus y anticipan cabildearán a partir del lunes en Washington para contrarrestar la versión que puedan ofrecer allá sobre el resultado de la votación los grupos estadistas.
Para los portavoces de Marchemos y el Movimiento Amplio de Soberanistas de Puerto Rico (MAS), el propuesto boicot al plebiscito ha sido un error estratégico del liderato de los partidos políticos al dejar solo al gubernamental Partido Nuevo Progresista (PNP) en un evento electoral del que intentarán sacar millaje político a favor de la anexión de Puerto Rico a los Estados Unidos.
En el caso del MAS, el grupo que defiende la fórmula de libre asociación para Puerto Rico, la determinación de apuntarse en el plebiscito se produjo como respuesta a la férrea defensa al ELA territorial de los llamados 'inmovilistas' dentro del Partido Popular Democrático (PPD), tras la carta enviada por el Departamento de Justicia federal sobre las definiciones en la papeleta.
'Cuando se anunció el boicot, la consecuencia fue que los inmovilistas ocuparon el campo, llegando a decir que el territorio es bueno. Ahí decidimos entrar porque el espacio no se puede dejar vacío. La ley está mal concebida. Creo que el PNP ha legislado para cargarla a favor de la estadidad. No obstante, entendemos es una buena oportunidad para educar sobre la libre asociación', explicó a NotiCel Iván Rivera, portavoz del MAS.
Criticó que el boicot se lleve a cabo incorrectamente sin las estrategias paralelas para evidenciar que la mayor parte del país rechaza la consulta. Rivera sostuvo que el llamado al boicot debió estar acompañado de una campaña o manifestación que magnifique y evidencia la abstención electoral.
'Cuando el PPD y el PIP hicieron un llamado al boicot en el vacío, no dijeron cuál es la acción concertada para llevar el mensaje al mundo de que ese día en específico todos estamos en boicot. No se organizaron para definir esa abstención de pueblo más allá de decirle que se fueran para la playa', indicó el abogado soberanista.
Insistió que el propósito de participar fue neutralizar que la única discusión ideológica que hubiera en todo el proceso de campaña fuera la estadidad y el estatus quo, como resultado del retraimiento de todo liderato de la oposición política.
'El boicot siempre fue, incluso antes de la carta de justicia federal, la estrategia de los inmovilistas', añadió.
Según Rivera, el grupo se creó inicialmente hace más de un año como una entidad con el propósito de orientar y educar a la ciudadanía sobre la opción de la libre asociación.
La idea era insertar a MAS en la discusión pública con la publicación de trabajos académicos sobre la realidad de esta opción en el siglo 21, contrarrestando los mitos que la rodean. Como un primer paso, el pasado año la organización participó en las audiencias del Comité de Descolonización de las Naciones Unidas.
Sobre el resultado del plebiscito, Rivera anticipó que ni el Departamento de Justicia de EEUU ni el Congreso van a hacer nada para mover el tema del estatus de Puerto Rico ya que no les conviene, porque el gobierno estadounidense está 'cómodo con la colonia'.
No obstante, el MAS continuará con sus esfuerzos con una estrategia de cabildeo en Washington a partir del lunes para contrarrestar la campaña que se espera realice el sector estadista sobre la votación.
De igual forma, el grupo que defiende la independencia en el plebiscito conocido como Marchemos, se mantendrá activo pasada la elección del próximo domingo.
Samuel Quiñones, portavoz del grupo coincidió en que el boicot es un error estratégico porque fomenta el inmovilismo colonial.
'Vamos a estar legitimados para ir a Washington. El que boicotea no tiene derecho a ir. Nosotros vamos a estar allí. Para nosotros este es el peor momento para llevar la estadidad', señaló Quiñones.
Para Marchemos, la precaria situación fiscal que llevó a radicar la quiebra del gobierno y el racismo rampante en EEUU, anticipa el rechazo abierto del gobierno estadounidense a la estadidad, momento en que se podrá adelantar la independencia como alternativa viable.
'Para los independentistas este es el mejor momento para que los estadistas lleven la (petición de) estadidad a Washington', puntualizó.
Dijo que las estrategias que han usado los independentistas que les critican han fallado ya que, por años, se ha visto una reducción en las personas que ven en la independencia una fórmula viable de salir de la situación colonial.
'Había que participar. Había que defender la independencia porque la dejaron sola ante muchos ataques. Subestimar a Ricardo Rosselló es un error. Algún día mis amigos del independentismo comprenderán que cuando llegue el momento de empujar a los americanos a que se decidan, este plebiscito resultará en una buena inversión', aseguró Quiñones.
Dijo que decidieron organizarse para participar en el plebiscito tras la campaña publicitaria de los estadistas que utiliza imágenes de los incidentes posteriores a la manifestación convocada el 1ro de mayo para criminalizar y hacer lucir como violentos a los independentistas.
'Ahí vino lo del 1ro de mayo. No hicieron nada más que retirarse y comenzaron una campaña sucia. Para nosotros eso (los incidentes del 1ro de mayo) fue orquestado con el propósito de pasar anuncios con un incidente creado. No nos cabe la menor duda', sostuvo el abogado independentista, militante por décadas del Partido Independentista Puertorriqueño.
Quiñones mencionó que, aunque corta y sin levantar dinero, Marchemos ha logrado neutralizar esa campaña llevando el mensaje de la independencia como una alternativa a largo plazo. Además, buscarán reclutar observadores para participar del proceso de votación.