'Jalda Arriba' presenta a Bernier como ente unificador (galería)
La comedia musical Jalda Arriba, que el Partido Popular Democrático (PPD) estrenó el sábado en el Centro de Bellas Artes de Caguas, sirvió para presentar a su candidato a la gobernación, David Bernier, como único ente unificador entre los puertorriqueños.
La obra de una hora y media de duración cuenta una simple y cómica historia de un abuelo llamado Don Toño, recalcitrantemente popular e hincha de Luís Muñoz Marín, Rafael Hernández Colón y el resto de los gobernadores que en las papeletas para su elección fueron acompañados por la tradicional insignia del 'pan, tierra y libertad'. Aferrado a sus convicciones populares, enfrenta en la obra su peor pesadilla: su nieto Javier se enamoró de una penepé de una familia de sangre azul.
Entre comedia y arreglos musicales, la trama va preparando la camita para el mensaje que desde iniciada la campaña electoral del 2016, Bernier lleva profesando. 'El esfuerzo (para ayudar a Puerto Rico) tiene que ser libre de prejuicios, el esfuerzo tiene que ser de un solo país. Como hoy nos cuenta esta historia, tenemos que dejar a un lado las cosas que nos dividen para hacer causa común para levantar esta patria'.
'Tenemos en escena un musical hecho con mucho cariño y amor, que le da taller a los artistas puertorriqueños, que permite de igual forma contar una historia muy liviana pero muy bonita donde colocamos la unidad por encima de cualquier cosa y como es fundamental en los asuntos familiares y de pueblo pueda prevalecer siempre la sensatez y dejar a un lado el fanatismo político', indicó Bernier previo al inicio de la obra dirigida por Gilberto Valenzuela.
Bernier escribió la historia junto a Agio Brecha en espacio de unas semanas, igual que un musical que hizo durante su incumbencia como más que manda en el Comité Olímpico y cuyo propósito en aquella ocasión era recaudar fondos para atletas envejecientes. Ahora, rescatando una vieja idea, la adaptó para el beneficio económico del Partido Popular y su campaña.
Según explicó el senador Jorge Suárez, 'es algo novel. No hemos hecho nunca una obra de teatro como un mecanismo para recaudar fondos para la campaña política. La realidad es que esto es una actividad para recaudar fondos tanto para el Partido Popular como para la candidatura de David Bernier. También, esta actividad es un reflejo real de la historia del Partido Popular y hay cientos de personas en el teatro para disfrutar de un evento novel'.
Parte del libreto incluyó la participación del Exsecretario de Estado. En un momento que Don Toño está en el hospital víctima de un ataque de nervios tras enterarse que su futura ahijada es estadista, este recibe la visita de candidato a la Gobernación. Cuando el abuelo le explicó a Bernier la situación, el candidato le indicó debería darle una oportunidad a la mujer dejando a un lado sus prejuicios como popular de clavo pasa'o, abonando a la imagen pública de Bernier como ente unificador entre los puertorriqueños.
En síntesis, ahí la trama: 'Dios bendiga al colorao', aquel que pudo convencer a Don Toño que solo la unión entre todos los puertorriqueños brindarán a Puerto Rico la oportunidad de salir hacia adelante, sin importar la Junta de Control Fiscal, los asuntos deestatus y el fanatismo político.
En la obra, Bernier también hizo mención de los zapatos que su contrincante político le regaló luego de obsequiarle a Ricardo Rosselló una espada de esgrima. Confesó al abuelo mientras hablaba con él que los tenis le quedaron chiquitos, lo que provocó una de muchas carcajadas entre la audiencia que presenció esta comedia musical.
'Hay un poco de todo. Se critican a todos los sectores ideológicos por igual. Es un asunto de actitud humana que sirve para pasarla bien y, sobre todo, para comprender el mucho daño que le ha hecho a nuestro país el fanatismo político', añadió Bernier en su aparte con la prensa.
Durante la toda la presentación hubo alusiones a políticos, funcionarios de gobierno y temas de interés público, tanto para criticar como para elogiar. Los blancos fáciles fueron penepés reconocidos como Carlos Romero Barceló y el puño que recibió en un restaurante. Pero también se relajaron a populares como SilaMaría Calderón y su 'enamoramiento' con Ramón Cantero Frau mientras ésta residía en Fortaleza. De la misma forma, hubo menciones cómicas de Pedro Rosselló, Rafael Hernández Colón, Alexandra Lúgaro, Pokemon Go, Naled y hasta de Jay Fonseca.
Entre la batería de críticas, resaltó con apoyo de la audiencia un nudge a Juan Zaragoza, quien sentenció Don Toño 'hizo lo que se tenía que hacer hace rato. Qué hasta las iglesias paguen'. Adicionalmente, hablaron de la diáspora y de la decisión de irse del país como una 'personal y del individuo' a la vez que lanzaban su pullita contra ellos al estilo #YoNoMeQuito.
Hasta Trump se llevó su agüita, siendo criticado por el abuelo por sus comentarios xenofóbicos. Curiosamente, el único penepé que no fue sujeto a chistes fue Luis A. Ferré, descrito en la obra como 'un caballero. Pero los (gobernadores estadistas) que vinieron después, no'.