Consciente del deficit fiscal que ya ha trascendido varias administraciones políticas, el gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, reconoce la necesidad de reducir el gasto público y fomentar el ahorro para paliar la crisis que mantiene a la Isla en el abismo económico.

Sin embargo, y a pesar de las difíciles medidas económicas que los tiempos exigen, el nuevo primer ejecutivo cree que la proyectada disciplina fiscal no necesariamente tiene que afectar la prestación de servicios de beneficencia social hacia aquellos sectores más desfavorecidos del País.

En todo caso, la estrategia de austeridad de García Padilla ha enfilado sus cañones hacia los denominados gastos alegres de jefes de agencias y otros funcionarios gubernamentales.

'Aquí en Fortaleza, con el trabajo que llevamos, hemos reducido la nómina por más de un millón de dólares. He dado instrucciones a los jefes de gabinete a que hagan eso en cada agencia del país. Ese dinero que existe se redirige para atender el problema deficitario, de manera que no se afecte o se afecte lo menos posible las asignaciones a la beneficencia social', explicó el gobernador en la tarde del jueves en entrevista con NotiCel desde la Fortaleza.

De hecho, García Padilla emitió una orden ejecutiva exigiendo el control del gasto público en las agencias de gobierno.

A preguntas de NotiCel en torno a si estas políticas de austeridad en las agencias serán suficientes para destinar dinero a programas de beneficencia y no serán utilizadas con el casi único propósito de saldar las deudas con bonistas - tal y como han adelantado varios expertos en temas económicos -, el gobernador insistió en que su administración está tomando las medidas correctas.

'Tienes un dólar para gastar en vehículos de motor para los secretarios de agencia. Tú puedes decidir ahorrar ese dólar, destinas 50 centavos a beneficencia social y 50 centavos al ahorro. Así cumpliste ambos objetivos. Esa reducción de gastos sería dirigido a algunas utilidades que no son indispensables', indicó García Padilla.

'Uno empieza por reducir gastos en lo más innecesario', añadió el primer mandatario isleño.

El gobernador, además, reconoció que ante la alta tasa desempleo y la existencia de trabajos que no pagan lo suficiente como para subsistir en el Puerto Rico de hoy, los programas de asistencia social continúan siendo indispensables para muchas familias en la Isla.

Asimismo, añadió que uno de sus objetivos será restaurar algunos servicios sociales que, según él, fueron abandonados por la pasada administración de Luis Fortuño.

'Hay cosas que no se pueden discutir ni eliminar, como por ejemplo, la atención a las querellas de maltrato de menores. Eso ha sido abandonado. Más de 30,000 querellas están atrasadas. Sin embargo, el Departamento de Familia tenía dinero para contratar a Rolando Crespo e implementar un programa de valores. Rolando Crespo fue contratado para un programa de valores, pero no había dinero para atender las querellas de maltrato a menores', apostilló García Padilla al criticar que, en medio de un déficit presupuestario, se contratara al ex legislador que abandonó su escaño por arrojar positivo a cocaína.

(Primera parte de la primera entrevista otorgada por el gobernador a un medio digital el primer día de sus funciones en La Fortaleza)

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