Se percató de que una guagua la seguía y se lo comentó a familiares.

Jesmarie Rivera Santiago asesinada por su expareja en un incidente que tuvo lugar en un colmado de Cataño, sentía que era perseguida hace días.

Así lo revelaron familiares de la joven de 28 años en entrevista con Telemundo, donde sin identificarse aludieron a que esta les había comentado que vio una guagua igual a la de su expareja y cercana a ella, acechándola.

Sin embargo, no fue hasta el lunes cuando esta pudo confirmar que se trataba de su expareja y padre de su hija de tres años, Jorge Luis Rosado Colón, porque lo vio en la guagua y confirmó lo que ya temía.

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Familiares de la joven aludieron a que ella buscó ayuda el mismo lunes, cuando se percató de que el hombre la perseguía, en el Cuartel de Cataño, pero que le dijeron que no podían hacer nada.

El teniente Eliezer Vargas, comisionado de la Policía de Cataño, por su parte, dijo a Telemundo que no tenía récord de que la mujer hubiese pedido ayuda allí el lunes.

Un día después de la alegada petición de ayuda, Rivera Santiago fue al colmado para comprar pan para el desayuno de sus hijos. El hombre, también de 28 años, llegó hasta el lugar y la asesinó de un disparo en la cabeza.

Posteriormente, Rosado Colón se atrincheró en el colmado con el arma y luego se quitó la vida.