Ayer se reportaron casos en Isabela, Aguadilla, Loíza, San Sebastián (2) y Guaynabo.

El robo de los convertidores de catalíticos está imparable desde que comenzó la ola de la apropiación ilegal de estas piezas en febrero pasado y pese a la labor de la Policía.

Solo ayer se volvieron a reportar robos de catalíticos en cinco municipios del país sin discriminación de lugar: puede ser que se registren en la costa o la montaña, la ciudad o el campo, nadie está a salvo de que hurten el accesorio de su carro.

Según las estadísticas provistas por el Negociado de la Policía, en lo que va de año se han reportado más de 1,650robos de esta pieza.

De esa cantidad, la inmensa mayoría, 1,298 o el 78%, corresponden a la marca japonesa Mitsubishi.

La mayoría de los robos son en modelos SUV, ya que no hay que levantarlos para llevarse los catalíticos.

Además de ser importante para el funcionamiento de un vehículo, ya que controla la emisión de gases tóxicos, esta pieza -que está cerca del mofle- es hurtada principalmente ya que tiene varios metales valiosos en el mercado callejero como el platino, el paladio y el rodio.

El valor de algunos catalíticos ha sido estimado en $800 o hasta $1,500 dependiendo de la marca y el modelo.

Por eso siguen los robos y también las iniciativas para combatirlos, como en el Senado, que busca aumentar las penas por este delito del que no escarmientan los ladrones.

Anoche, cerca de las 8:00 de la noche, en Isabela, la víctima fue la dueña de un Mitsubishi, modelo Outlander, que dejó estacionado en la carretera PR-466, km 7.4 del barrio Bajuras.

También ayer, en Aguadilla, Evelyn González Correa, reportó el robo de la pieza de su vehículo, también Mitsubishi, modelo Outlander, en la calle Hangar, anexo al estacionamiento de un centro de entretenimiento.

Los robos siguieron ayer, sábado, en Loíza, sector de Piñones, específicamente en la carretera PR-187, donde el querellante se percató de que alguien le había hurtado el catalítico a su vehículo Mitsubishi, modelo Outlander, de 2021.

En San Sebastián hubo dos robos: uno en la mañana y otro en la tarde de hoy. El primero fue en una calle del barrio Mirabales, sector Los Pérez, donde Eneida Lamboy Rosado, dejó estacionado su vehículo Toyota, modelo Tercell y le robaron la pieza.

El otro caso fue en el barrio Calabaza y el querellante, Orlando González, denunció el robo de la pieza a su vehículo Ford, modelo Súper Duty E-250.

La seguidilla de robos de los convertidores de catalíticos culminó en Guaynabo ayer, en la carretera PR-838 del barrio Frailes.

Una conductora denunció a la Policía que le habían robado la pieza de su guagua Mitsubishi, modelo Outlander, de 2020.