Nuestro "comeback"
La secretaria de Recreacion y Deportes, Adriana Sánchez, hace un recuento del impacto que ha tenido la pandemia de COVID-19 en el ámbito deportivo.
A un mes desde que se declarara estado de emergencia en Puerto Rico debido a la pandemia del coronavirus COVID-19, y se implementaran medidas de aislamiento y distanciamiento social, todavía no hemos visto lo peor de esta enfermedad.
Todos hemos sido testigos de las implicaciones en todas las áreas de nuestro diario vivir y el deporte no es la excepción. La gran interrogante sigue siendo, ¿cómo vamos a hacer nuestro "comeback" a la vida deportiva?
Para contestar esta pregunta debemos conocer todo lo que se ha afectado, cómo y las consecuencias que tiene.
La primera y más obvia consecuencia del COVID-19 es la suspensión de todas las actividades deportivas, medida que tomamos el mismo día en que se declaró el estado de emergencia. Esto crea un efecto en cadena en todos los sectores deportivos, tanto las ligas profesionales como las comunidades y poblaciones que se benefician de los servicios que ofrece el Departamento de Recreación y Deportes (DRD).
Afecta a los atletas profesionales, los jóvenes en desarrollo, la población con diversidad funcional, nuestros adultos mayores, los organizadores deportivos, auspiciadores, los empleados y contratistas que dependen de estas actividades para recibir ingresos y estudiantes-atletas que buscaban becas universitarias o que se harían disponibles para los sorteos de las ligas profesionales, entre otros. Sin embargo, era una medida que tenía que tomarse pues los eventos deportivos son focos de propagación por la cantidad de personas que aglutinan y el contacto físico al que estamos expuestos todos los que participamos de alguna manera.
Estas suspensiones tienen efectos económicos, legales y, por supuesto, en el entrenamiento adecuado y continuo de los deportistas. CNN reportó que el presidente de La Liga de Fútbol Profesional de España, Javier Tebas, estima las pérdidas por la suspensión de la temporada en $780 millones entre taquillas, abonos y derechos televisivos. Forbes informa que la cancelación de la última parte del spring training en Arizona para la venidera temporada de MLB podrá representar una pérdida de $100 millones para Phoenix, únicamente. Mientras en Puerto Rico, el BSN, la principal liga profesional, todavía evalúa el impacto final que tendrán estos días de cierre.
Legalmente, veremos la activación de las conocidas cláusulas de fuerza mayor o caso fortuito para liberar de responsabilidad a las partes que se obligaron contractualmente a cumplir con una prestación. Pero, ¿a caso alguna entidad se protegió con una póliza de seguro que los ayudara a cubrir alguna pérdida por la cancelación de su evento por causa de fuerza mayor? Esto fue lo que hizo el All England Lawn Tennis Association, organizadores del torneo de tenis Wimbledon, quienes por 17 años han pagado una póliza de cancelación del evento por razón de una pandemia. Este año, cancelaron el torneo –por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial– y activaron su póliza. Se informa que podrán recibir cerca de $141millones.
No obstante, la actividad deportiva más importante no es, necesariamente, la profesional –aunque sea la que más dinero mueve– sino la que vemos en nuestras comunidades, en nuestros barrios y con nuestros amigos. Son esos torneos y actividades recreativas donde nos juntamos a pasarla bien, conocernos y divertirnos. La que realmente impacta a la mayor cantidad de personas. ¿Cómo reactivamos esa? Comienza con nosotros, desde ahora en nuestras casas. Mantenernos activos en nuestros hogares es el inicio de esa reactivación y ese eventual "comeback" a nuestras actividades. Cada día en las redes sociales del DRD y en la página web (drdpuertorico.com) subimos rutinas, consejos y actividades que pueden realizar para mantenerse en condición o para perfeccionar alguna destreza.
Ahora bien, tengamos en cuenta que cuando todo esto acabe y estemos en posición de regresar, tampoco podrá ser de la misma manera como lo dejamos. Tendrá que ser un retorno paulatino, con paciencia. Tendremos que pensar en actividades con participación limitada; ligas profesionales que comiencen sus eventos sin público; prácticas y torneos con máximo de participantes. Pensemos en itinerarios de ligas profesionales que incluyan doble juego un mismo día para poder recuperar el tiempo que han estado detenidas. Evaluemos el progreso y si las medidas han logrado mantener el contagio en niveles aceptables médicamente y replanteemos los próximos pasos, incluyendo si podemos ir flexibilizando las mismas.
Al final, debemos lograr un sabio balance entre la salud y bienestar de todos, y el impacto económico en el deporte. En mi opinión, la balanza siempre debe inclinarse más al lado de la salud.
Pero aprovechemos la oportunidad, el Comisionado de MLB, Rob Manfred, ha dicho que no descarta que la post temporada y Serie Mundial pueda jugarse en un lugar neutral y con clima cálido, ofrezcamos a Puerto Rico… después de todo estábamos listos para recibir a los Mets y los Marlins a finales de este mes.