ASES tendría que recortar beneficios si no puede reestructurar deuda
Es poco probable que la Administración de Seguros de Salud (ASES) pueda reestructurar deuda bajo los parámetros de la Ley 71 de 2014, y como escenario para reducir su deficit de $171 millones pudiera verse forzada a reducir beneficios, aumentar los copagos a los beneficiarios o limitar el acceso al Plan de Salud Gubernamental (PSG), según economistas consultados.
Según el director ejecutivo de la ASES, Ricardo Rivera, el déficit de $171 millones que establece el último informe financiero del Gobierno que tenía la corporación pública al 30 de junio de 2013, en parte está relacionado a la deuda con el Banco Gubernamental de Fomento (BGF), por concepto de una línea de crédito rotativa autorizada en octubre de 2011 por medio de la Ley 205.
En entrevista con NotiCel, el funcionario expuso que la ASES le debe al BGF $183 millones (la línea de crédito de $171.1 millones más el pago de intereses), que fue usada para pagar deudas con los proveedores de distintas regiones de Mi Salud y de diversas aseguradoras, que datan de antes de 2011.
Ya este diario digital también habría reportado que dentro de estas deudas sufragadas con la línea de crédito del BGF estaban las primas que se le adeudaban a ciertas compañías de seguros por los servicios prestados dentro de Mi Salud.
En esa línea, Rivera destacó que al cierre del pasado año (2013-2014) fiscal la ASES ya había saldado las deudas que mantenía con Triple-S Salud, Inc. y MCS Health Plan. En cuanto a Humana Health Plan solo les debían $13.8 millones, que esperan saldar en su totalidad para julio de 2015.
De otro lado, el funcionario aceptó que la corporación pública mantenía una deuda de $7.2 millones con el Gobierno Central, relacionada a una asignación otorgada a la ASES en el 2005 a través del Fondo General, para ayudarles con su liquidez.
Además, apuntó que el Gobierno le adeudaba a la ASES unos $44.6 millones, correspondientes a asignación pendiente de la Oficina de Gerencia y Presupuesto sobre la Ley 70 de 2010 (Ley del Programa de Incentivos, Retiro y Readiestramiento) y la deuda de los municipios por los empleados públicos que se han acogido a Mi Salud.
El funcionario insistió que la ASES ha hecho varios ajustes que han reducido el déficit operacional a $60 millones. Entre estos, resalta la negociación con las farmacéuticas para los precios de los medicamentos y los descuentos; la renegociacióncon las aseguradoras, y el plan de auditorías, entre otros.
A pesar del cuadro fiscal de la ASES, Rivera descartó que la corporación pública se vaya a la quiebra o se tenga que acoger a la Ley 71 de 2014, que permite la reestructuración de las deuda de las corporaciones.
'Nuestra deuda es prácticamente con el Banco Gubernamental de Fomento y asciende a $183 millones. Está por Ley cómo se va a repagar eso, y dice claramente en la Ley, que es del Fondo General. Así que si hay una reestructuración o cambio a eso, tiene que ser entre el Gobierno Central y el Banco Gubernamental de Fomento', puntualizó.
La Ley 173 de 2010 dispuso que el Gobierno cumpliera dichas obligaciones mediante asignaciones presupuestarias hechas por la Asamblea Legislativa en cada año fiscal.
La misma legislación establecía que a partir de este año fiscal (2014-2015) y por los próximos nueve años, se asignarían $20.6 millones más los intereses aplicables, para la amortización de dicha deuda.
Por su parte, el economista Elías Gutiérrez tuvo reparos de que la ASES se pueda acoger a la Ley 71 de 2014.
'El Gobernador creía que con esa Ley, él ponía una muralla china que separaba al Gobierno Central (su deuda y sus obligaciones) de las corporaciones públicas. Entonces allá una corporación pública quebraba y se mantenía el fuego contenido en esa finca', expuso.
Pero destaca que en el mercado han pesado las aseveraciones que ha hecho García Padilla sobre la injerencia en las corporaciones públicas, y el hecho de que el Gobierno Central ha subvencionado algunas con serios problemas fiscales o les adeuda dinero.
'O sea el Gobierno las está usando (a las corporaciones) para transferir su déficit del Fondo General hacia las corporaciones públicas. El mercado lo que hizo fue que rasuró el velo corporativo, y dijo todo esto es la misma cosa… Por eso la degradación vino completa', determinó.
No obstante, sí dejó claro que la Reforma de Salud es el 'origen' del problema de financiación que tiene el Gobierno, 'porque se puso en marcha sin los recursos necesarios para que pudiera funcionar'.
Gutiérrez condenó que las distintas administraciones utilizaran la Reforma como un elemento para ganar votos. Este destacó cómo se han usado líneas del crédito con el BGF para financiar el proyecto, e incluso se usaron parte de los recursos provenientes de la venta de la Telefónica.
A su juicio, 'ahora que el Gobierno está en una situación donde ya no puede hacer más trucos financieros, esto va a ir a donde inevitablemente tiene que ir, a mover el polvo y topar los recursos con la demanda'.
En ese sentido, aseveró que la salida que le queda a la ASES es ponerse más estricto en el acceso a Mi Salud.
A su vez el economista José Alameda opinó que el Gobierno pudiera estar moviendo las fichas para una combinación de reducción de beneficios, aumento de copagos a los beneficiarios, y/o limitar el acceso al PSG. Sin embargo, advirtió que el espíritu de la Ley 71 de 2014 no se presta para el Gobierno reestructure deuda que le deba una corporación pública.
Mientras, Rivera negó que entre los ajustes operacionales en la ASES se contemplen reducciones en los beneficios.
Tanto Gutiérrez como Alameda criticaron la falta de información por parte del Gobierno en relación a las medidas a tomar sobre la situación fiscal de la ASES.
'Ya yo no sé qué va a pasar aquí. Esto es todo los días una cosa nueva y lamentablemente cosas malas, negativas', sentenció Alameda.