Cincuenta años después de la histórica cosecha de salsa navideña, NotiCel recuerda gran parte de lo que se escuchó, por primera vez, aquel año.

En noviembre de 1973, mientras los salseros puertorriqueños sentían crecer el ansia de ver en vivo a la Fania All Stars (FAS) en San Juan, las emisoras de radio que se especializaban en música poco a poco comenzaron a compartir los temas de la FAS con los nuevos temas navideños que comenzaban a publicarse, sin saber que la cosecha de salsa navideña de ese año estaba por hacer historia.

Tras el concierto de la FAS el sábado, 17 de noviembre, en el coliseo Roberto Clemente, la nueva salsa navideña se apoderó pronto de las ondas radiales y por primera vez en Puerto Rico, la Navidad se caracterizó por la clave y la campana. Y seguramente los salseros se volcaron en las tiendas para comprar las nuevas producciones.

El auge de la salsa navideña en Puerto Rico tuvo un comienzo auspicioso a principios de los 70, cuando Willie Colón publicó su producción “Asalto navideño” (1971), que tuvo tanto éxito que comenzó una ola de grabaciones que tuvo su punto culminante dos años después cuando salieron al mismo tiempo varios discos navideños que hoy son clásicos.

“Lo que fue el ‘Asalto navideño’ rompió todos los patrones. Sigue siendo el álbum de salsa navideña más vendido en la historia. Pueden venir y hacer hoy un junte con lo mejor de ahora para grabar un disco y no van a sobrepasar lo que hizo Willie Colón con Héctor Lavoe”, expresó el promotor y empresario Richie Viera, dueño de Viera Discos, en Toa Baja.

¿Por qué tuvo tanto éxito esa música?, preguntó NotiCel.

“Mira, la base está en el dolor. No hay amor sin dolor. Los puertorriqueños en Nueva York sentían el dolor de la patria (por la lejanía) y eso se reflejaba en la música que hacían porque la patria es amor. Ese sonido lo creó Willie, que fue trompetista primero y luego trombonista”, indicó.

“Entonces, Willie y Héctor pudieron repetir en el 73 la fórmula del ‘Asalto navideño’ con ese volumen 2”, agregó Viera. Porque, precisamente, el volumen 2 del “Asalto navideño”, de Fania Records, lideró la cosecha de la salsa navideña de ese año. Colón fue el productor, de nuevo, al tiempo que Johnny Pacheco fue el director de la grabación.

Ese álbum contiene clásicos como “Cantemos”, “Doña Santos”, “Pa’ los pueblos”, “La banda” y otros éxitos como “Recomendación”, “Pescao”, “Arbolito” y “Tranquilidad”.

Pero también las otras producciones que se publicaron ese año pasaron a ser “leyendas” por el sentimiento que provocaban y la calidad con la que fueron grabadas.

“Lo más curioso es que oyes cualquiera de esas producciones y la gente siente todavía el espíritu navideño. Y han pasado 50 años. Esa música se sigue escuchando como fresca porque también fue grabada con excelente calidad, especialmente las del sello Fania”, manifestó Viera.

Otras producciones de la cosecha del 73

También de Fania se publicó el disco de Cheo Feliciano “Felicidades”. El tema “Mapeyé” se convirtió en clásico rápidamente, pero también temas como “Felicidades” y “Aleluya de los campos” lucharon por el espacio radial ese año y se quedaron. Otras canciones incluidas fueron: “Me la gozo entera”, “Comadrita”, “Pa la gente panameña”, “Mañana boricua”, “La fiesta”, “El parrandero” y “A las alegres campanas”. La producción fue una conjunta entre el jefe de la Fania, Jerry Masucci, y el compositor Tite Curet Alonso. Pacheco dirigió la grabación.

El sello Vaya produjo un LP a la orquesta Impacto Crea y el tema que pegó fue “Vámonos de fiesta”. Esta orquesta recién se había fundado y esta era apenas su segunda producción, pero tuvo un tremendo éxito y contó con la ayuda de Ismael Miranda y Adalberto Santiago. Otros temas incluidos son: “Recuerdos de Navidad”, “Fiesta en Navidad”, “El lechón”, “Navidades en Crea”, “Los niños en Navidad”, “El cantar de un borincano” y “A Dios y los Santos”. Este álbum fue producido por Carmelo Rivera y todos los arreglos musicales también fueron de él.

Como si no fuera poco, El Gran Combo también grabó un disco de Navidad, del que fueron sus mayores éxitos “Eliminación de feos” y “Los zapatos de Manacho”. También incluyó “Con güiro y pandereta”, “Si no me dan de beber, lloro”, “Reluciente sol”, “Villarán cuenca – Moriré como Mojica”, “Lamento jíbaro” y “Mi plena”. El álbum se tituló “El Gran Combo 5” y tiene las voces de Andy Montañez y Charlie Aponte -en su debut discográfico con el combo-. El título del disco respondía a que era la quinta producción de la orquesta bajo su propio sello disquero EGC.

Pero la cosa no queda ahí porque el sello Borinquen sacó ese mismo año la producción “La salsa de Borinquen en Navidad” con la participación de varias de sus orquestas como La Selecta, La Zodiac, El Sabor de Nacho y Pellín Rodríguez. El álbum se produjo como si la grabación hubiera sido en vivo, estrategia que se utilizaba bastante en esa época. “Parranda Selecta”, de Raphy Leavitt, y “Lechón a la varita” de Pellín Rodríguez fueron los grandes éxitos. También se incluyeron los temas “Dormilón” (El Sabor de Nacho), “Niño y payaso” (Orq. Zodiac), “No vuelvas Navidad” (Pellín Rodríguez), “Candela” (Félix del Rosario), “Fiesta de Navidad” (Raphy Leavitt), “Doce campanadas” (El Sabor de Nacho), “Zodiac en Navidad” (Orq. Zodiac) y “Cascabel” (Félix del Rosario).

Y el recordado pianista y director Pijuán también sacó su producción “Un chorrito de pitorro” con el éxito del mismo nombre. Pero el disco también tenía temas como “De Borinquen a Panamá”, “Feliz Navidad”, “El vago de Navidad”, “Alegría, alegría”, “En el campo se goza más”, “Arbolito”, “Tú y yo en Navidad”, “Los cacheteros” y “A la zarandela”. La grabación salió bajo el sello Discos Melón, producido por Tomás Figueroa.

“Me llama la atención la trascendencia de algunas canciones de ese año”, comentó a NotiCel el productor radial Elmer González, quien realiza los programas “Son del Caribe” y “Son de Cuba” en Radio Universidad de Puerto Rico. “Creo que ese fue el año del génesis de los clásicos de navidad en la salsa. Esos temas que mencionas convierten al 1973 en el año cumbre de la salsa navideña de Puerto Rico”, expresó.

La producción salsera en Navidad no se quedó ahí

Viera, quien también fue manejador de la FAS, resalta que lo de 1973 fue solo el principio porque el resto de la década del 70 fue muy prolífico en producciones de salsa navideña, aunque no hubo un año en particular que superara la cosecha del 73.

“Fue muy singular y marcado porque en esa década también están otros álbumes de Ismael Rivera, Richie Ray con Bobby Cruz, Santos Colón, Pijuán, El Gran Combo, la Sonora Ponceña y otras orquestas”, mencionó. “Fueron alrededor de 12 producciones que pasan 50 años y siguen ahí montadas en el favor del público. Fue increíble”, indicó.

Y como dueño de una tienda de discos especializada en el género tropical, da fe de que esas grabaciones siguen vendiéndose muy bien.

“Se siguen vendiendo como pan caliente. La gente sigue buscándolas. Recuerdo que en esa época la gente tenía que tener esos discos obliga’os para la Navidad. Antes la gente compraba dos o tres por si acaso se le perdía o le quitaban uno”, afirmó.

Los que recuerdan bien esa Navidad del 73, con tantos éxitos salseros sonando al mismo tiempo -éxitos que hoy son verdaderos clásicos- y los que no la vivieron, pero se la imaginan, pueden seguir escuchando todos esos clásicos gracias a la magia de las grabaciones en audio y video. Pero, aunque ha habido años de buena producción salsera en Puerto Rico, nunca se ha repetido ese fenómeno del 73.

Para Viera “no hay manera de que el mundo olvide esas piezas que han pasado de generación en generación. Esa época se quedó marcada para siempre”.