La puñalada recibida por el líder de la oposición surcoreana no hace temer por su vida
El hombre le clavó un objeto que aún no se ha identificado y que tendría una longitud de entre 20 y 30 centímetros, provocándole una herida incisa de aproximadamente un centímetro.
Seúl.- La puñalada en el cuello recibida hoy por Lee Jae-myung, el líder del principal partido opositor en Corea del Sur, no hace temer por su vida, dijeron fuentes de su formación, el liberal Partido Democrático (PD) citadas por la agencia Yonhap.
No obstante, existe preocupación sobre la posibilidad de que Lee, de 59 años, pueda sufrir nuevas hemorragias, indicaron las mencionadas fuentes.
Lee fue atacado a las 10.27 hora local (1.27 GMT) durante un acto con periodistas en el terreno que acogerá el nuevo aeropuerto de Busan (unos 350 kilómetros al sureste de Seúl) cuando un hombre, que lucía una corona en la que se podía leer "Yo soy Lee Jae-myung", se abalanzó sobre el líder del principal bloque de la oposición surcoreana y le apuñaló en el lado izquierdo del cuello.
El hombre le clavó un objeto que aún no se ha identificado y que tendría una longitud de entre 20 y 30 centímetros, provocándole una herida incisa de aproximadamente un centímetro.
Lee se desplomó al instante y miembros de su partido se encargaron de tapar la herida mientras llegaba la ambulancia que lo trasladó al Hospital de la Universidad Nacional de Pusan.
El autor del ataque, un hombre de entre 60 y 70 años, fue arrestado en el acto pero aún no ha revelado la motivación detrás de sus acciones, según la Policía del distrito de Gangseo, en Busan.
Tras recibir atención de urgencia en Busan, Lee ha sido trasladado en helicóptero a la capital para ser intervenido en el Hospital de la Universidad Nacional de Seúl del importante daño sufrido en la yugular.
El estado de salud de Lee plantea una nueva incógnita para el PD de cara a las elecciones legislativas del próximo abril.
En las últimas semanas ya se han planteado dudas sobre si Lee lograría llegar a los comicios como líder de la oposición ante las presiones internas que le exigen que dimita por las investigaciones en curso sobre su supuesta participación en tramas de corrupción cuando fue alcalde de Seongnam, ciudad en las afueras de Seúl, y gobernador de Gyeonggi, la provincia más poblada del país.