Panamá envía a Estados Unidos 49 toneladas de cocaína para su incineración
CIUDAD DE PANAMÁ — Un total de 49 toneladas de cocaína decomisadas por la Fuerza Pública en más de un centenar de operaciones fueron enviadas este jueves a los Estados Unidos, en donde serán incineradas, informó el Ministerio de Seguridad Pública de Panamá.
"La lucha contra el crimen organizado ha sido efectiva, en los dos últimos años hemos logrado cifras récord en cuanto a incautación de drogas. Estos son duros golpes al crimen organizado y a las finanzas de estos grupos criminales”, afirmó en un comunicado el ministro de Seguridad Pública de Panamá, Juan Manuel Pino.
El regente de la seguridad Pública panameña apuntó que con el cargamento viajan nueve funcionarios, de diversas entidades gubernamentales de Panamá,"que van ser fieles testigos de esta destrucción de drogas" que se hará en un incinerador en territorio estadounidense.
Adelantó que este año se debe terminar el proyecto del incinerador en Panamá para evitar el envió de droga a Estados Unidos y la quema en espacio abierto.
Pino destacó el trabajo que hacen las autoridades panameñas en cuanto a la incautación de drogas y a la vez precisó que en lo que va del año, "Panamá lleva más de 36 toneladas de drogas incautadas" en más de 135 operaciones.
El ministro panameño señaló que este 2023 se tiene el mismo objetivo de los años 2021 y 2022, en donde se lograron "incautaciones históricas".
Las autoridades panameñas incautaron en 2022 la cifra histórica de 138,41 toneladas de drogas, de ellas 108,82 toneladas fueron cocaína, y capturaron al menos 600 personas, de ellas 402 eran ciudadanos panameños y el resto extranjeros, según datos del Ministerio de Seguridad Pública.
"Panamá está haciendo su función y cuidando que esa droga no llegue a territorio, porque si llega a nuestras costas, a nuestro pueblo, se convierte en un problema automático, de orden público", apuntó el ministro panameño.
Panamá es utilizado como puente de la droga que se produce en Suramérica y que tiene como destino principal EE.UU., el mayor consumidor de cocaína del mundo, y también Europa.