Servicio Secreto no puede recuperar mensajes borrados del 6 de enero
El viernes el presidente del comité que investiga los hechos violentos de ese día, había requerido estos mensajes, que aunque fueron borrados consideraba que debía seguir siendo accesibles en otras partes del sistema.
WASHINGTON - El Servicio Secreto de Estados Unidos, el cuerpo encargado de proteger entre otros al presidente del país, determinó que no puede recuperar los mensajes de texto borrados enviados durante el 5 y el 6 de enero de 2021, coincidiendo con el asalto al Capitolio por parte de miles de seguidores del entonces presidente Donald Trump (2017-2021).
Según publicaron este martes The Washington Post y CNN, que citaron a fuentes anónimas, el Servicio Secreto llegó a la conclusión de que los mensajes que le reclama la comisión de la Cámara de Representantes que investiga los hechos son irrecuperables.
El pasado viernes, el presidente del comité, el demócrata Bennie Thompson, informó que había requerido al Servicio Secreto que les facilitara estos mensajes, que aunque fueron borrados consideraba que debía seguir siendo accesibles en otras partes del sistema.
Una carta del Departamento de Seguridad Nacional enviada un día antes -el jueves de la semana pasada- a la comisión había revelado que los mensajes fueron borrados como parte de un programa de reemplazo de dispositivos.
La misiva explicaba que los mensajes fueron eliminados poco después de que la Oficina del Inspector General reclamara documentación de las comunicaciones electrónicas llevadas a cabo por el Servicio Secreto como parte de su evaluación de los hechos ocurridos en el Capitolio en la jornada del 6 de enero de 2021.
A principios de julio, el director del Servicio Secreto, James Murray, anunció que dejará el cargo a finales de mes, y la prensa local reveló que se irá a trabajar a la empresa de la red social Snapchat.
Murray se retirará del cuerpo el próximo 30 de julio tras 27 años de servicio, 3 de ellos como director desde que fuera nombrado para ese puesto en mayo de 2019 por el entonces presidente Donald Trump.
Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo en rueda de prensa que la salida de Murray lleva meses preparándose y que no tiene nada que ver con la polémica que ha rodeado al Servicio Secreto durante los últimos días en relación a su actuación en la jornada del 6 de enero de 2021.
A finales de junio, una exempleada de la Casa Blanca durante el mandato de Trump dijo ante el comité que investiga el asalto al Capitolio que el entonces mandatario ordenó al conductor de su limusina dirigirse a la sede del Congreso y que cuando este se negó, Trump trató de hacerse con el control del volante.
Fuentes anónimas llevan desde el momento mismo de la declaración desmintiendo a la prensa este hecho y aseguran que el Servicio Secreto está en disposición de dar testimonio bajo juramento negando lo contado por la exempleada, algo que por el momento no ha ocurrido.