Sandinistas celebran el 43 aniversario de su revolución que acabó con la dictadura de Somoza
El FSLN, con el presidente Daniel Ortega a la cabeza, mantiene un poder absoluto en Nicaragua.
MANAGUA- El gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), con el presidente Daniel Ortega a la cabeza, celebró este martes el 43º aniversario del triunfo de su revolución con más poder que nunca, consolidando su modelo de gobierno con mano de hierro, sin contrapesos y con una oposición diezmada por el encarcelamiento y el exilio.
Aliado de Cuba, China, Irán, Rusia y Venezuela, y enemistado con Estados Unidos y con el Episcopado nicaragüense, los sandinistas conmemoraron el aniversario del derrocamiento de la dictadura de Anastasio Somoza Debayle con un absoluto control político y militar, y con la mirada puesta en los comicios municipales de noviembre próximo.
También colocando en agenda el tema del relevo en el FSLN, cuyo máximo líder y único candidato a la Presidencia, desde 1984 a la fecha, ha sido Ortega.
"Cuando Daniel no esté"
Juan Carlos Ortega Murillo, uno de los hijos del mandatario, publicó en sus redes sociales una reflexión sobre "cuando Daniel no esté".
En el escrito, titulado "Daniel, Fuerza vital de pueblo", Ortega Murillo sostuvo que Nicaragua cuenta "con un país, con un continente, con un Daniel que despierta el amor, que es furia pasional, que es intensidad de lucha, capaz de trascender las nuevas generaciones".
"Y todos somos Daniel, como punta de lanza de este continente. De Nicaragua; su corazón e ideales para el Mundo. Y cuando Daniel no esté, su fuerza vital, de pueblo, visión de futuro soñado y eterno, lo vamos a encarnar todos", apostilló.
El primero de mayo pasado, durante un acto oficial con motivo del Día Internacional de los Trabajadores, Ortega aseguró que el FSLN, fundado en 1961 y en el poder desde 2007, "va quedando ya" en manos de los jóvenes.
Ortega, un exguerrillero que el 11 de noviembre próximo cumple 77 años, lleva más de la mitad de su vida como líder indiscutible del FSLN, partido del que ha sido su candidato presidencial en los comicios de 1984, 1990, 1996, 2001, 2006, 2011, 2016 y en 2021.
El antiguo guerrillero marxista es el político nicaragüense que más veces se ha presentado como candidato presidencial, con ocho, y también el jefe de Estado con más tiempo en el poder en Nicaragua, con 26 años y tres meses (incluyendo los seis años que coordinó la Junta de Gobierno), superando a Anastasio Somoza García (16 años y 9 meses) y a José Santos Zelaya (16 años y 6 meses).
Actualmente lleva 15 años y 6 meses consecutivos en el poder, en medio de denuncias de autoritarismo y fraude electoral.
Consolida el modelo de partido único
El líder sandinista, que dirige el país más empobrecido de Centroamérica y el tercero más pobre de América, aplastó a la fuerza la revuelta popular que estalló en abril de 2018 por una controvertida reforma a la seguridad social, que dejó cientos de muertos, detenidos y decenas de miles en el exilio, y que tildó como un "fallido intento de golpe de Estado".
Desde entonces, cualquier disenso o protesta es neutralizada por la Policía Nacional que dirige su consuegro, Francisco Díaz, y de la que Ortega se enorgullece por sus raíces sandinistas.
Previo al aniversario de la revolución, las autoridades despojaron al partido opositor Ciudadanos por la Libertad de las cinco alcaldías que administraban, ahora en manos del FSLN, e ilegalizaron cientos de ONG.
En noviembre próximo, los nicaragüenses elegirán a los alcaldes, vicealcaldes y concejales de los 153 municipios de Nicaragua, de las cuales 140 están actualmente bajo administración del FSLN, incluido las cinco que estaban en mano de la disidencia.
¿Dinastía familiar?
Organizaciones opositoras, como la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia que llamaron a "quedarse en casa" este día en rechazo a la "persecución" a la iglesia Católica, consideran que Ortega ha sepultado la autonomía municipal y "que el totalitarismo es el camino que ha emprendido para consolidar el modelo de partido único, como en Cuba, China y Corea del Norte".
Según distintos sectores, incluido el Episcopado nicaragüense, el líder sandinista apuntala la perpetuación en el ejercicio del poder, la concentración del poder en unos pocos -principalmente familiar-, el control social mediante organismos partidarios y la militarización del Estado.
En el marco del 43º aniversario del triunfo de su revolución, los sandinistas han celebrado con vigilias, conciertos y caravanas de vehículos, y gritando consignas a favor de Ortega, quien tiene previsto encabezar un acto en conmemoración de la efemérides.
Durante ese acto, en el que participarán representantes de 31 países, el mandatario condecorará al primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, con la "Orden Augusto César Sandino" en su máximo grado, "Batalla de San Jacinto", de acuerdo a la información oficial.