Recientemente, Rusia capturó dos mercenarios estadounidenses y consideran la pena de muerte para ellos.

Moscú exige a Washington que impida el reclutamiento y envío de ciudadanos estadounidenses al conflicto bélico en Ucrania, declaró hoy la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, que amenazó con "consecuencias impredecibles" para las relaciones entre Rusia y Estados Unidos.

Según la representante de la diplomacia rusa, la Embajada de Ucrania en Estados Unidos es la encargada de este proceso de reclutamiento, que tendría lugar con el beneplácito de las autoridades estadounidenses en Washington.

"Exigimos decididamente a la parte estadounidense que ponga fin a este tipo de actividades de la legación diplomática ucraniana", señaló en un comunicado.

Según Zajárova, el reclutamiento de mercenarios por parte de la Embajada ucraniana "no solo crea un peligro directo a la vida y la seguridad de ciudadanos de Estados Unidos y contradice abiertamente su estatus diplomático, sino que amenaza con tener consecuencias internacionales impredecibles y graves".

La portavoz de Exteriores señaló que estas labores de reclutamiento tienen lugar "con la connivencia de la Casa Blanca y los servicios de inteligencia estadounidenses" y tienen como fin enviar ciudadanos de Estados Unidos a los combates en Ucrania y en las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk.

"Se trata de actividades de la Embajada de Ucrania en Washington que contradicen la convención de Viena de 1961 sobre relaciones diplomáticas con el fin de reclutar abiertamente combatientes para la llamada Legión Extranjera de la Defensa Territorial de Ucrania", señaló.

Para Zajárova, esto es una muestra de que "Washington no está interesado en solucionar el conflicto ucraniano sino que, por el contrario, trata de atizarlo, enfocado en la derrota estratégica de Rusia".

Rusia ha denunciado en reiteradas ocasiones la presencia de combatientes extranjeros en Ucrania y ha advertido que en caso de que sean capturados no serán tratados como prisioneros de guerra.

Según informó a mediados de junio el Ministerio de Defensa ruso, las tropas rusas habrían eliminado a 1,956 mercenarios en Ucrania, de un total de 6,956 combatientes extranjeros que luchan con las fuerzas ucranianas.

El portavoz de la entidad castrense, Igor Konashénkov, señaló que la mayoría de estos combatientes son polacos, pero aseguró también que hay muchos de Rumanía y Reino Unido.

El mando ruso informó que desde el otro lado del océano llegaron a Ucrania 601 canadienses y 530 estadounidenses.

Los separatistas rusos ya condenaron a muerte a tres combatientes extranjeros, dos británicos y un marroquí, y amenazan con condenar a muerte a otros, entre los cuales habría dos estadounidenses.