Comienza el juicio por un plan de secuestro a la gobernadora de Michigan
Los cuatro hombres acusados estaban descontentos con las restricciones de la pandemia.
WASHINGTON - El juicio de cuatro hombres acusados de planificar en 2020 el secuestro de la gobernadora de Michigan, la demócrata Gretchen Whitmer, porque estaban descontentos con las restricciones de la pandemia, comenzó este martes con la selección de miembros del jurado.
La supuesta conspiración incluyó a seis hombres, pero dos se declararon culpables antes del juicio.
Según documentos del juicio, los acusados, que enfrentan cadena perpetua si son declarados culpables, estaban furiosos por las restricciones que Whitmer había instituido en el estado para contener la pandemia de la covid-19.
Al abrirse la audiencia, en la cual la fiscalía y la defensa bregan para seleccionar a los miembros del jurado, el juez federal de Michigan Robert Jonker advirtió a los ciudadanos convocados de que a él no le importa la opinión que tengan sobre la gobernadora.
"La única cosa que importa es la evidencia, lo que los testigos digan bajo juramento y lo que las presentaciones les muestren, ésa ha de ser la única base de su decisión", apuntó el juez.
"A algunos de ustedes puede que les guste Whitmer. A otros, quizá no", continuó Jonker. "Si ustedes creen que ella es la mejor de todos los tiempos, pero la fiscalía no ha probado su acusación, deben votar 'no culpable'".
Los cuatro enjuiciados incluyen a Adam Fox, quien según la fiscalía fue el cabecilla del plan y quien junto con Barry Croft estaba afiliado con el grupo derechista anti-gubernamental "Three Percenter".
Los otros dos acusados son Daniel Harris y Brandon Caserta, miembros de la milicia Wolverine Watchmen, también de derecha y opuesta al Gobierno.
En el juicio los otros dos implicados, Ty Gabin y Kaleb Franks, que admitieron su culpabilidad serán testigos a favor de la fiscalía, según la cual entre junio y octubre de 2020 el grupo planificó capturar a Whitmer en su casa de veraneo.
Los cargos incluyen conspiración para usar armas de destrucción masiva porque, según la fiscalía, los implicados buscaban armar explosivos y la destrucción de un puente cerca de la residencia de la gobernadora.