Su cuerpo llegó a forenses sin órganos.

Keren Vallejo esperaba su segundo hijo. Como muchas otras madres, pensaba que su hijo vendría al mundo de manera natural, pero la situación se complicó al llegar a la Clínica 31 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de donde salió únicamente hacia otra clínica donde certificaron su muerte.

Según reportan varios medios mexicanos e internacionales, la pesadilla comenzó el 30 de enero de 2022, cuando Keren comenzó a sentir contracciones. La mujer, junto a su esposo, Michael Cortés, acudió a la referida clínica. En el lugar la atendieron una ginecóloga de apellido Islas -cuyo nombre no ha sido revelado- y un ginecólogo practicante que no había terminado su carrera.

La ginecóloga entendió que el tamaño del bebé de Keren era muy grande, por lo que dijo que no podría tenerlo de manera natural y prefirió hacerle una cesara.

De lo que sucedió luego hay varias versiones.

Según reporta Diario México, uno de los principales medios de comunicación en ese país, información que han recopilado apunta a que tras la cesarea, cuando la ginecóloga se disponía a "cerrar" la incisión en el vientre de la paciente, el practicante se percató de un desgarre y alertó a la ginecóloga del caso.

La mujer, se alega, que hizo caso omiso al practicante y le dijo: "tú no sabes", procediendo a cerrar la herida de la paciente.

Keren fue trasladada al área de recuperación de la clínica, pero varios días de después, en lugar de mejorar, su condición empeoraba.

Su esposo habló con otro diario mexicano -La Voz de la Frontera-, y dijo que la versión inicial de la clínica fue a que la mujer "se le bajó la presión".

“Me entrevisté con una mujer joven que aplicó la anestesia y otro doctor, me dicen que se puso grave, que respondió y movió las manos pero que se le bajó la presión", narró Cortés, que también dijo que le mencionaron que su hijo nació en perfectas condiciones, y que anteriormente le habían dicho que todo estaba bien.

Keren fue trasladada a otra clínica luego de la comunicación realizada a su esposo, pero esa otra institución de salud dijo que ya no había nada por hacer, que la mujer había fallecido.

¿Qué le pasó a Keren? Eso es lo que quiere saber su esposo, y también sus familiares.

La versión primaria de las autoridades fue que la mujer murió de un choque hipovolémico y una hemorragia peritoneal. Pero los familiares dudan de esa versión y pidieron una nueva autopsia.

Fue tras la autopsia que la preocupación aumentó. Según indicó el esposo de la mujer, el centro que realizaría la autopsia primero recibió un cuerpo de otra mujer que no era Karen.

Luego, confirmaron que recibieron el cuerpo de Keren, pero sin órganos. La falta de órganos no hace posible que se realice una nueva autopsia, y además, levanta serias interrogantes sobre lo que le ocurrió realmente a la mujer y lo que hicieron con sus órganos.