Funeral de Wright se convierte en un grito por la reforma policial en Estados Unidos
El funeral del joven negro Daunte Wright, que murió recientemente por un disparo de una policía en Brooklyn Center, Mineápolis, se convirtió este jueves en una reivindicación para exigir una reforma policial a nivel nacional.
El encargado del sermón, el reverendo Al Sharpton, un conocido defensor de los derechos civiles en Estados Unidos, auguró que las muertes de Wright y de George Floyd a manos de agentes de policía en Minesota "traerán un cambio nacional".
"En nombre de Daunte, vamos a aprobar la 'Ley de Justicia en la Policía George Floyd' como ley federal", aseguró Sharpton frente a las 600 personas, según dijo la organización a Efe, que llenaron una iglesia cercana a los lugares donde perecieron los dos hombres.
Wright, de 20 años, falleció el pasado 11 de abril por un disparo de la agente Kim Potter, quien, de acuerdo a la versión oficial, confundió su arma de electrochoque, también conocida como táser, con una pistola de fuego durante un control de tráfico.
Por una Policía ''Más responsable''
Al llamamiento de Sharpton se sumaron otras voces, como las de la senadora de EE.UU. por Minesota, Amy Klobuchar y el abogado de la familia, Ben Crump.
Ese letrado también representó a los parientes de Floyd en el juicio contra el expolicía Derek Chauvin, hallado esta semana culpable por un jurado de tres delitos de asesinato y homicidio involuntario.
"Es hora de que Washington D.C. progrese en la necesaria reforma policial y apruebe la 'Ley de Justicia en la Policía de George Floyd'. Debemos hacer que la Policía sea más responsable", señaló Klobuchar, que se sentó al lado del gobernador de Minesota, Tim Walz, durante las exequias.
Los dirigentes políticos que asistieron al funeral de Wright consideraron que EE.UU. debe cambiar la capacitación de los agentes y los estándares de la Policía, incluyendo la prohibición de las técnicas de estrangulamiento durante los arrestos.
Sin agentes en el funeral
Previamente, Crump hizo levantarse a toda la audiencia al grito de "La vida de Daunte Wright importó", emulando el lema del grupo "Black Lives Matter" (las vidas negras importan).
Crump citó otros casos de brutalidad policial contra afroamericanos como los de Floyd; Rodney King, apaleado por agentes en 1991 en Los Ángeles, y Oscar Grant, que murió por una "equivocación" de la Policía en 2009.
El letrado recordó estos episodios delante la familia de Floyd, los padres de Grant y el novio de Breonna Taylor, una mujer negra que también fue víctima de la violencia policial el año pasado, que asistieron a la ceremonia en homenaje a Wright.
Para esta ocasión, la seguridad del funeral estuvo a cargo del histórico grupo de autodefensa de la comunidad negra en EE.UU., las "Panteras Negras" (Black Panthers), en vez de agentes de policía.
La familia está rota
La atención durante las exequias estuvo centrada en los padres de Wright, Katie y Audrey, quienes señalaron que ninguna palabra puede "describir" el dolor que sienten en estos momentos.
La madre, Katie, indicó entre lágrimas que su hijo debería haberla enterrado a ella y no al revés.
"Nunca imaginé que estaría aquí, mi hijo debería haberme enterrado", dijo la mujer, rota de dolor, mientras su marido la abrazaba.
El fallecimiento de su hijo ha avivado las tensiones en Mineápolis, que ya estaban a flor de piel debido al juicio contra Chauvin por la muerte de Floyd, grabada en un video que el año pasado dio la vuelta al mundo y espoleó unas protestas históricas contra la brutalidad policial y el racismo.
En los últimos dos días, la brutalidad policial contra los afroamericanos ha continuado en Estados Unidos: Andrew Brown, de 42 años, y Ma'Khia Bryant, de 16 años, fallecieron por disparos de agentes en Carolina del Norte y Ohio, respectivamente.