Abogados de Trump inician su alegato defendiendo el derecho a la libertad de expresión
Sus defensores afirman que el expresidente fue un mandatario que siempre estuvo junto a la "ley y el orden".
WASHINGTON - Los abogados del expresidente de Estados Unidos Donald Trump iniciaron este viernes sus alegatos en el juicio político contra él por "incitar a la insurrección" por el asalto al Capitolio defendiendo su derecho a la libertad de expresión y retratándolo como un mandatario que siempre estuvo junto a la "ley y el orden".
"Esta farsa de juicio político supone una amenaza seria a la libertad de expresión de los líderes políticos de ambos partidos en todos los niveles del Gobierno", dijo uno de los letrados del exmandatario, Michael Van Der Veen, en su intervención ante el Senado, donde se desarrolla el proceso.
En ese sentido, el abogado advirtió que la Cámara Alta "debería ser extremadamente cuidadosa sobre el precedente, el precedente que este caso pueda establecer".
Al igual que la acusación demócrata hizo en los dos últimos días, la defensa de Trump se apoyó en videos para ilustrar sus argumentos, como cuando lo describió como un mandatario que siempre estuvo junto a la "ley y el orden".
Durante su mandato, el exmandatario se puso al lado de las fuerzas de seguridad, cuando hubo protestas y disturbios raciales, especialmente tras la muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía blanco, lo que contrastó con su reacción a la hora de condenar la acción de grupos supremacistas y de ultraderecha, que fue normalmente tibia.
Trump afronta este "impeachment", como se dice en inglés juicio político, por el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero por parte de una turba de sus seguidores justo cuando las dos cámaras del Congreso estaba reunidas para ratificar la victoria del demócrata Joe Biden en los comicios de noviembre.
Minutos antes de ese ataque, el mandatario pronunció un discurso incendiario desde la Casa Blanca en el que instó a sus partidarios a que marcharan hacia el Capitolio y les pidió que "detuvieran el robo" de los comicios, al alegar sin pruebas que hubo un fraude electoral.
Van Der Veen sostuvo que "ninguna persona pensante podría creer seriamente que el discurso del presidente del 6 de enero en la Elipse fue de alguna manera una incitación a la violencia o la insurrección".
"Lejos de promover la insurrección en Estados Unidos las declaraciones del presidente animaron explícitamente a quienes asistieron al ejercicio pacífico y patriótico de sus derechos, y la protesta patriótica es la antítesis del asalto violento al Capitolio de la nación", dijo.
Van Der Veen describió a los centenares de manifestantes que entraron en el Capitolio, como "un pequeño grupo que vino para comportarse de manera violenta y amenazante, que secuestró el evento para sus propios propósitos" y, en ese sentido, apuntó al movimiento de corte anarquista Antifa.
Sin embargo, entre la multitud concentrada ese día había partidarios del mandatario, veteranos del Ejército y miembros de grupos de ultraderecha y del movimiento conspiranoico QAnon.
Según datos ofrecidos por la cadena CBS el pasado fin de semana, que citó a fuentes del FBI, de los 205 arrestos por esos sucesos, al menos 25 sospechosos tienen vínculos con grupos extremistas de extrema derecha, como los Proud Boys, Oath Keepers, Three Percenters y Texas Freedom Force, y con QAnon; mientras que hay 16 veteranos de las Fuerzas Armadas y 2 soldados reservistas.
La defensa de Trump ya ha anunciado que posiblemente no agotará las 16 horas a lo largo de dos días de las que dispone para exponer su argumentación y que tratará de culminar sus alegatos lo antes posible.