Republicanos defienden su decisión de confirmar a Kavanaugh
Varios senadores republicanos defendieron hoy a Brett Kavanaugh, que se convirtió este sábado en nuevo juez del Tribunal Supremo de EE.UU., despues de una reñida votación (50-48) en el Senado marcada por las alegaciones de presuntos abusos sexuales del magistrado.
'Establecimos que la presunción de inocencia sigue siendo importante. Estoy orgulloso de mis colegas; fue un día importante para el Senado de Estados Unidos', aseveró el líder de la mayoría republicana en la cámara, Mitch McConnell, en declaraciones a la cadena de televisión estadounidense Fox News.
McConnell, además, criticó la 'campaña demócrata' para desestabilizar a Kavanaugh, que ha sido acusado en las últimas semanas por tres mujeres de abusos sexuales, que presuntamente cometió hace varias decadas.
Su colega republicano, el influyente senador Lindsey Graham compartió el enfado con los senadores demócratas y dijo que 'nunca' había estado tan enojado 'en toda su vida', en relación al proceso de confirmación de Kavanaugh.
'Estoy feliz de haber ayudado a superar el esfuerzo de algunos para humillar a un hombre que conozco desde hace 20 años', declaró tambien a la cadena Fox Graham, miembro del Comite Judicial del Senado que evaluó al magistrado previo paso a la votación final.
La elección de este sábado fue el último paso de un proceso que comenzó el pasado 9 de julio, cuando Trump anunció la nominación de Kavanaugh para el Supremo.
Posteriormente, el 4 de septiembre se iniciaron las audiencias que debían evaluar su candidatura en el Comite Judicial del Senado, donde los demócratas pusieron el foco en sus posturas sobre el aborto y el poder presidencial.
Cuando el comite se disponía a votar, los demócratas pusieron sobre la mesa la acusación de abuso contra Kavanaugh de la profesora de psicología Christine Blasey Ford, que acudió la semana pasada a narrar su versión de los hechos, supuestamente ocurridos en 1982.
Las alegaciones de Ford estuvieron seguidas de las de otras dos mujeres, lo que ocasionó que los senadores presionaran a Trump para que el FBI investigara las acusaciones y emitiera un informe confidencial este jueves.
Pese a las serias acusaciones, Kavanaugh logró los apoyos necesarios para ser confirmado y ocupar así el cargo vitalicio en el Tribunal Supremo, que juró ayer mismo horas más tarde de la votación en el Senado.