La tasa de personas encarceladas en EE.UU. alcanzó en 2016 su nivel más bajo en 20 años, con 2.2 millones de reos privados de libertad, pero se mantiene en la cabeza a nivel mundial, indicó hoy el centro de estudios Pew.

A finales de 2016 había 2.2 millones de presos en EE.UU., incluidos los 1.5 millones bajo jurisdicción estatal y federal, y 740,000 más en prisiones locales, lo que supone una tasa de 860 reos por cada 100,000 adultos, según datos de la Oficina de Estadística de Justicia (BJS, por su sigla en ingles).

El país registró su cifra record en el periodo entre 2006 y 2008, con 1,000 presos por cada 100,000 adultos, y desde entonces ha ido reduciendose de manera paulatina hasta niveles no vistos desde 1996.

Tambien el total de personas encarceladas ha ido disminuyendo al pasar desde el record de 2.31 millones a los 2.16 millones de la actualidad.

Como factores de esta tendencia, el estudio cita la reducción en las tasas de criminalidad, que llevan consigo menores arrestos; y los cambios en los patrones de condena, con la rebaja de las sentencias para aquellos condenados por delitos relacionados con el tráfico o consumo de drogas.

No obstante, y pese a esta tendencia a la baja, el centro Pew subraya que EE.UU. sigue a la cabeza a nivel mundial.

Para ello, cita la base de datos global 'World Prison Brief', que sitúa a EE.UU. en 2018 en 655 presos por 100,000 habitantes, seguido por El Salvador, con 614 por 100,000 habitantes.