República Dominicana abre sus puertas a China
República Dominicana dio un giro en su política exterior al romper sus históricos lazos con Taiwán y establecer relaciones diplomáticas con China, una decisión aplaudida hoy por el empresariado dominicano por las oportunidades económicas que consideran que se abren a partir de ahora.
Un día despues del anuncio del establecimiento de relaciones diplomáticas con China, la cúpula empresarial e industrial dominicana expresó hoy su satisfacción por esta decisión.
Así, el presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), Pedro Brache, consideró que se trata de 'una decisión trascendental puesto que abre un mundo de oportunidades'.
Mientras que el presidente de la Asociación de Industriales de República Dominicana (Aird), Campos de Moya, señaló que estas relaciones con China son muy importantes para el país porque 'en estos momentos se puede convertir fácilmente en un punto intermediario en la manufactura china hacia el mercado de America'.
En este mismo sentido se expresó hoy el vicepresidente ejecutivo de Asociación Dominicana de Zonas Francas (Adozona), Jose Manuel Torres, quien afirmó que es una gran oportunidad para el país ya que 'China está relocalizando empresas e inversiones hacia otros países'.
Desde hace años, los sectores productivos dominicanos habían solicitado un mayor acercamiento diplomático, comercial y económico con China, segunda potencia económica mundial.
El ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, y el canciller dominicano, Miguel Vargas, rubricaron ayer en Pekín los nuevos lazos entre los países y anunciaron la apertura de embajadas e intercambio 'inmediato' de embajadores.
En Taipei, el ministro de Exteriores taiwanes, Joseph Wu, dio ayer de forma simultánea en la que anunció el fin de los lazos con el país caribeño 'para preservar la soberanía y la dignidad nacional' y la suspensión inmediata de todos los proyectos de cooperación y ayuda.
Al anunciar en Santo Domingo la decisión del Gobierno dominicano, el consultor jurídico del Poder Ejecutivo, Flavio Darío Espinal, dijo ayer que se abrirán paulatinamente enormes oportunidades de cooperación, no solo en el terreno comercial, sino tambien financiero, tecnológico, turístico, educativo o energetico.
Como ejemplo mencionó las perspectivas que se abren para el sector turístico dominicano, principal fuente de ingresos del país, ya que más de 135 millones de turistas chinos visitan anualmente destinos internacionales y ahora con el establecimiento de relaciones diplomáticas se espera que parte de ese turismo fluya hacia la isla caribeña.
Pese a no tener hasta ayer lazos diplomáticos con China, el comercio bilateral creció en los últimos años e incluso el pasado 10 de abril, el presidente dominicano, Danilo Medina, asistió a la inauguración de la empresa Kingtom Aluminio SRL, primera firma china que se instala en este país.
República Dominicana es el segundo socio comercial para China de la zona caribeña y Centroamerica con un intercambio comercial que ronda los 2,000 millones de dólares, según cifras del Gobierno dominicano.
En un comunicado, la representante de la Oficina de Desarrollo Comercial en la República Dominicana, Fu Xinrong, consideró hoy que 'se empieza a abrir una nueva página de la historia en las relaciones bilaterales porque a partir de hoy la República Dominicana cuenta con un nuevo amigo solidario y socio de cooperación mutuamente beneficiosa en el camino de desarrollo y revitalización'.
'Nos interesa compartir los exitos, la experiencia y el desarrollo de nuestro país con la República Dominicana. Tendremos oportunidades que se irán transformando en resultados reales y beneficios tangibles para el bienestar de más de 10 millones de dominicanos', añadió Xinrong.
Con esta decisión, República Dominicana se ha sumado así a una tendencia iniciada por otros países que en poco menos de año y medio han decido estrechar lazos con China en detrimento de Taiwán, como Panamá el pasado junio, o Santo Tome y Príncipe en diciembre de 2016.
El ministro de Exteriores taiwanes, Joseph Wu, culpó a China de la ruptura, por su oferta de 'incentivos financieros' y promesas de inversiones y ayuda al país caribeño, destinadas a desencadenar la ruptura de lazos con Taiwán.