Poco respaldo a la decisión de Trump de despedir a jefe del FBI
Apenas un 29 % de los estadounidenses apoya la decisión del presidente Donald Trump de despedir a James Comey como director del FBI, mientras que un 38 % la desaprueba, según un sondeo divulgado hoy.
La encuesta, realizada por la cadena NBC y el diario The Wall Street Journal, muestra que hay otro 32 % de entrevistados que evita pronunciarse sobre el despido fulminante de Comey, anunciado el pasado martes y que ha provocado una crisis sin precedentes en el Gobierno de Trump, quien asumió la Presidencia en enero.
Entre aquellos encuestados que afirman haber leído o escuchado 'mucho' sobre el tema, el desacuerdo con la decisión de Trump sube hasta el 53 %, frente al 33 % que la apoya.
El sondeo se elaboró del 11 al 13 de mayo con entrevistas a 800 adultos y su margen de error es de +/- 3,5 puntos porcentuales.
Trump comentó este sábado que quiere nominar 'rápido' a un nuevo director para el FBI, un cargo que requiere confirmación del Senado, y precisó que es posible que eso ocurra incluso antes del próximo viernes, cuando partirá hacia Arabia Saudí en su primera gira internacional.
El presidente describió a los candidatos para reemplazar a Comey como 'sobresalientes', 'muy conocidos' y 'del más alto nivel'.
Las entrevistas a los candidatos comenzaron este sábado, dirigidas por el fiscal general de EE.UU., Jeff Sessions, y su 'número dos', Rod Rosenstein, según confirmó a Efe una fuente familiarizada con el proceso.
Entre los nombres que suenan para reemplazar a Comey están el actual director interino del FBI, Andrew McCabe; el senador republicano John Cornyn; el juez Michael Garcia, de la corte de apelaciones de Nueva York; y Alice Fisher, exjefa de la división criminal del Departamento de Justicia.
También están en la lista de candidatos Adam Lee, responsable de la oficina del FBI en Richmond (Virginia); Frances Townsend, exasesora de seguridad nacional y contra el terrorismo del expresidente George W. Bush; y el excongresista y exagente del FBI Mike Rogers, quien tiene el apoyo de la asociación de agentes del FBI.
La Casa Blanca ha incurrido en numerosas contradicciones al explicar la decisión de Trump, quien, por otro lado, ha negado haber exigido 'lealtad' a Comey, algo que fuentes cercanas al exdirector del FBI aseguran que hizo durante una cena privada entre ambos a finales de enero.
Trump no ha querido confirmar si tiene grabaciones de las conversaciones que mantuvo con Comey, al ser preguntado en una entrevista con la cadena Fox por un tuit que envió el viernes y en el que dijo que 'más le valía' al exdirector del FBI que no hubiera 'cintas' de esas charlas, 'antes de que él empiece a filtrar a la prensa' su versión de los hechos.