Barberías de Lima ponen de moda la Navidad en los cabellos
Lima - Una máquina de cortar, cuchillas, tijeras, escobillas y un diseño en la pantalla del 'smartphone' son los implementos que los barberos peruanos usan para plasmar las imágenes de moda en el cabello de sus clientes y la Navidad no escapa de sus manos.
Muy distintas a las tradicionales peluquerías limeñas, donde la atención se hace casi exclusivamente por mujeres, las 'barber shop', un concepto nuevo en la ciudad, son consideradas 'un espacio para hombres', con una atención masculina que los hace sentir 'en confianza' para pedir desde depilación de cejas a tratamientos faciales.
Particularmente en esta época de fiestas, la Navidad está siendo también abordada por los barberos de Lima, donde imágenes de Papa Noel y los pinos navideños se han convertido en diseños que los clientes estiman apropiados para sus cabellos.
'Me gusta hacerme diseños y ahora hacerme un diseño navideño por fiestas me gusta, me gusta hacerme muchas cosas', dijo a Efe en una barbería limeña Jefferson, de 23 años, quien antes de plasmar un Papá Noel y una luna navideña en su cabeza, tenía la imagen de una sirena.
José Manuel Rea, un obrero de construcción de 32 años y cliente habitual, explicó a Efe que este tipo de barberías son espacios 'para puros hombres', donde él suele hacerse 'cortes a la moda, lo que mi peluquero recomiende y algún arreglo de las cejas'.
Aunque la barbería está fuertemente asociada a los cortes de cabello, los servicios varían desde tinturación de cejas a limpiezas faciales, depilaciones y tratamientos capilares.
'Aún no me he hecho limpieza facial, pero sí he visto y creo que está bien hacerse, siempre es bueno cuidarnos', añadió Juan Manuel, quien suele ir a retocarse el diseño de corte dos veces al mes.
El trato, la elegancia y el profesionalismo son algunas de las características que los clientes resaltan de las barberías, donde se da prioridad al 'diseño, un buen retoque y el corte preciso'.
Pablo Guerrero es barbero y con 31 años es dueño de su 'barber shop' en el distrito de Breña, cercano al centro histórico de Lima.
Conocido entre sus clientes como Eikon Guerrero, se inició hace seis años en el corte de cabello de forma privada, 'para amigos y familiares', mientras realizaba largas jornadas en la construcción o en la promoción de productos en los supermercados de la capital.
Las tijeras y la máquina de cortar eran dos objetos que a Guerrero le llamaban la atención, así que hace cinco años decidió embarcarse al 100% en lo que considera su pasión, aquello en lo que decidió formarse de manera profesional.
'Me metí a un taller y, poco a poco, fui agarrando algunas pautas', explicó.
Hace dos años y medio cuenta con una barbería donde los altoparlantes no conocen los límites y donde los graffitis y el olor a gel se esparce por cada rincón, ahí atiende a unas 18 personas al día, a quienes ha 'ayudado a mejorar su autoestima con un corte'.
Guerrero siente además que aporta a la juventud porque 'ellos ven en la barbería algo que les puede gustar y yo los incentivo, porque es mejor que se pongan a hacer esto de forma profesional, a que hagan otras cosas'.
Lejos de los estereotipos, las 'barber shop' han conquistado la nueva masculinidad limeña, que no tiene miedo de lucir más arreglada, 'así como la mujer siempre ha tenido su espacio, su spa, ahora nosotros también tenemos nuestro espacio, ahora los varones dedicamos un tiempo a buscar looks, tendencias nuevas, se trata de fusionar la barbería clásica con la modernidad', añadió Guerrero.
El tiempo para realizar un corte es de 30 minutos a una hora y 'dependerá del tipo de corte y el diseño' y los precios varían desde 20 soles (6.30 dólares) a 70 soles (20 dólares) de acuerdo con la dificultad del diseño elegido.
Con poco más de cinco años en Lima, se calcula que hoy existen alrededor de mil barberías en los diversos distritos de la capital y su expansión es creciente en todo el Perú.
Además de los centros de belleza, el negocio de las 'barber shop' incluye escuelas del oficio, donde los cursos para ser barbero cuestan entre 200 y 300 dólares y toma de 5 semanas a 3 meses de formación, por lo que se ha convertido en una opción laboral para los jóvenes peruanos.