NY propone legislación para enfrentar la legionelosis
A raíz del brote de legionelosis que se vive en Nueva York, que ha dejado al menos 12 muertos tras los dos nuevos casos conocidos hoy lunes, la ciudad obligará a registrar todas las torres de refrigeración de edificios para que sean revisadas regularmente y se evite así la reaparición de la enfermedad.
El alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, hizo el anuncio acompañado por la presidenta del Concejo municipal, Melissa Mark Viverito, mientras hoy se conocieron dos nuevas víctimas mortales del brote.
De Blasio adelantó que mañana se presentará una legislación que, además de obligar al registro de las torres, requerirá inspecciones trimestrales, que serán hechas por el Departamento de Salud municipal, y una certificación anual de que la instalación está libre de la bacteria.
De acuerdo con el alcalde, con la medida se busca evitar futuros brotes de legionelosis en la ciudad, donde desde julio se han registrado 113 casos y 12 muertes en el sur del condado de El Bronx.
De Blasio advirtió que de no cumplir con la ley se impondrán severas penas, que serán determinadas por el Departamento de Edificios.
El alcalde reiteró durante una conferencia de prensa que la enfermedad está remitiendo.
'Confiamos en que el brote en el sur de El Bronx se haya contenido. Estamos trabajando con el Concejo para proteger a los neoyorquinos en un futuro a través de rigurosas regulaciones para los dueños de edificios', señaló el alcalde.
Destacó que Nueva York es la primera ciudad en el país en proponer nueva legislación sobre torres de enfriamiento.
El Departamento de Edificios, responsable por hacer y mantener el registro, informó por su parte que los dueños de los edificios que voluntariamente quieran comenzar a registrar las torres de enfriamiento en sus propiedades pueden hacerlo a través de la página de la agencia.
La legionela es un tipo de neumonía causada por bacterias que se adquiere, generalmente, por respirar vapor de agua contaminado y que puede provenir de elementos húmedos, como las grandes torres de refrigeración de los edificios.
Desde que comenzó el brote en el sur de El Bronx a mediados de julio, la inspección detectó doce lugares con la bacteria, de los que diez ya han sido limpiados, en un esfuerzo de las autoridades sanitarias de Nueva York y de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades.